Cómo empezar la operación bikini sin que el tiempo primaveral sea un problema

Adela Leonsegui (@AdelaLeonsegui) 01/05/2016 08:10

La puesta a punto antes que toque enseñar ‘body’ sólo tiene un camino: combinar dieta sana y ejercicio. Pero ni se te ocurra salir a lo loco a correr, hay que combinar ejercicios de cardio con otros de tonificación para obtener mejores y más rápidos resultados. Y si necesitas hacer un régimen de adelgazamiento ponte en manos de un profesional, es el único que te hará perder lo que te sobra y no sólo agua o músculo.

Las mil y una formas de hacer cardio en la calle sin parecer una loca perdida

Está claro que el ejercicio cardiovascular ayuda a perder peso, así que debe empezar a formar parte de tu rutina. En la calle puedes practiar el running o jogging o lo que toda la vida ha sido salir a correr, también caminar a buen paso -ahora se llama power walking- durante al menos 45 minutos, sustituir la bici por el coche, incluso jugar al fútbol o saltar a la cuerda con tus hijos en el parque son buenos ejemplos de ejercicios cardiovasculares. Si quieres acelerar la combustión de grasa realiza en tu recorrido picos de intensidad: más velocidad o mayor resistencia (practicar el ejercicio en terreno inclinado).

Cardio en el gimnasio cuando el tiempo no acompañe para estar en la calle

Ir al gimnasio no es sinónimo de aburrimiento, ni mucho menos porque para hacer ejercicios de cardio tienes muchísimas opciones. Por citar algunos ejemplos, puedes optar por correr o caminar rápido en la cinta, ejercitarte en la elíptica, practicar spinning, probar la máquina de remo, moverte a ritmo de zumba, retarte a una clase de jumping -ejercicio saltando en una cama elástica individual- o retarte aún más en una de kickboxing. Cualquiera de estos ejercicios disparará tus pulsaciones y por tanto la quema de calorías.

Una ayudita para perder grasa rápido: aplicar las reglas del HIIT

Tanto en la calle como en el gimnasio puedes realizar los ejercicios de cardio aplicando una vez a la semana las reglas del HIIT (entrenamiento por intervalos de alta intensidad) y el resto de los días seguir los principios del LISS (entrenamiento de baja intensidad y larga duración). Dentro del primero se encuentra el método Tábata que exige una rutina de entrenamiento de 4 minutos en los que se alterna un trabajo a muy alta intensidad durante 20 segundos, con 10 segundos de descanso. Sólo necesitas un cronómetro y mucho fondo porque los 4 minutos se hacen muy duros.

Tonificar el cuerpo, un objetivo a cumplir en el gimnasio

El objetivo de la tonificación es que el cuerpo se vea más fibroso, más fuerte y menos graso. Un buen entrenador sabe que para conseguir un cuerpo proporcionado es importante trabajar toda la musculatura del cuerpo con ejercicios anaeróbicos: piernas y glúteos, abdomen, pecho, espalda y brazos. Él mejor que nadie te marcará la pauta para iniciarte sin que el día siguiente seas una fuente de agujetas e irá cambiándote el número de repeticiones, de peso y de ejercicios para que no te resulte tedioso. Puedes optar por realizar los ejercicios de tonificación con o sin máquinas, con pesas o con el peso de tu cuerpo. También puedes elegir entre realizar la actividad de manera individual o con clases guiadas.

Las clases guiadas: tonificar el cuerpo en grupo ayuda a no desistir

Las clases de tonificación dirigidas cada vez ganan más adeptos y, prácticamente desaparecido el aerobic de los gimnasios, las más demandadas son: GAP, ejercicios con diversas técnicas centrados en fortalecer glúteos, abdominales y piernas, TRX, el entrenamiento en suspensión que trabaja todos los grupos musculares, Body Pump, que es un sistema de entrenamiento con barras y mancuernas al ritmo de la música y TBC, el Total Body Conditioning que trabaja todo el cuerpo y se basa en los principios de la educación física. Mención aparte merece el Pilates, una disciplina con más de 500 años de antigüedad cuyos objetivos son reforzar la musculatura y aumentar el control, la fuerza y flexibilidad del cuerpo.