Los caminos más seguros para conseguir un bronceado natural sin tostarte al sol vienen de la mano de la cosmética y la nutricosmética. Cremas, toallitas, ampollas, caña de azúcar y aceleradores del bronceado son tus aliados para subirle un par de tonos a tu piel.
Cosmética bronceadora
Dentro de la cosmética bronceadora existen dos tipos de fórmulas, las que puedes aplicar en casa y las que se realizan en centros de belleza.
Entre las primeras encuentras una gran diversidad de formatos: crema, loción, gotas, espray, bruma, aceite, toallita... Cualquiera que sea el método que elijas, el modo de empleo es similar en todos: antes de aplicar cualquiera de ellos es aconsejable exfoliar la piel para eliminar células muertas y conseguir un bronceado uniforme, esperar unos 5 o 10 minutos para vestirse e hidratar la piel a diario, ya que este tipo de productos suelen resecarla.
Si eliges el formato en crema, un truco es mezclar el autobronceador con la hidratante, de este modo es más fácil de aplicar, la hidratas directamente y consigues que el bronceado sea más progresivo.
En cuanto al los sistemas que se aplican en cabina, el más seguro es el bronceado de caña de azúcar. Consiste en rociar cuerpo y cara con un autobronceador cuyo principio activo es el mismo que se utiliza en las fórmulas anteriores (cremas, lociones, aceites…), el DHA (dihidroxiacetona). Este ingrediente es de origen natural y se obtiene principalmente a partir de la caña de azúcar y de la remolacha. Al no penetrar más allá del estrato córneo de la piel (la capa de células muertas), es completamente inocuo y el tono irá desapareciendo en unos 7 días con el proceso natural de exfoliación de la piel, e incluso antes si ésta se fuerza con un peeling.
Cualquiera que sea el sistema elegido, es importante evitar las exposiciones largas al sol, especialmente en las primeras 24 horas tras su aplicación, porque el DHA no sólo no protege de los rayos UV, sino que ha quedado demostrado que una piel tratada con DHA produce más radicales libres si se expone al sol que una que no ha sido tratada con este compuesto. Para evitar esta reacción basta aplicar una crema con factor de protección solar adecuado.
Nutricosmética bronceadora
La nutricosmética solar, en forma de ampollas o pastillas, se ha convertido en una de las fórmulas más populares para conseguir un bronceado progresivo sin sol. Si los autobronceadores de uso tópico suelen llevar DHA en su formulación, el ingrediente estrella de la nutricosmética autobronceadora son los carotenoides, pigmentos orgánicos que dan color a plantas, algas y hongos, que tiñen la piel de manera similar a la melanina y como muchos han eliminado el betacaroteno de su formulación, el bronceado no tiende a naranja.
Lo mejor es que basta ingerir la dosis recomendada para conseguir un bronceado uniforme en un par de meses. Hay que advertir que este tipo de nutricosmética no prepara la piel para el sol, ni ejerce de barrera contra los rayos UV, sólo aportan color a la piel y, por tanto, durante su uso es imprescindible utilizar un factor de protección adecuado.
El futuro autobronceador
Hace ya más de una década que un grupo de investigadores del Hospital General de Massachusetts, liderado por David Fisher, realiza investigaciones para trata de encontrar un fármaco que estimule la melanina, de este modo se conseguiría broncear la piel sin necesidad de exponerla a los rayos UV y sin dañar el ADN. En 2006 probaron con la forskolina, con la que obtuvieron buenos resultados en ratones, pero no en la piel humana.
En 2017 consiguieron identificar una molécula denominada SIK que es clave en la secreción de melanina: si esta molécula está activa, se detiene la producción de melanina. El paso siguiente fue desarrollar un medicamento inhibidor de la SIK, de manera que al aplicarlo en la piel se activa la melanina y se consigue el mismo bronceado que el inducido por los rayos ultravioleta, pero sin los peligros que se derivan de las radiaciones solares.
No obstante, los resultados no son definitivos y habrá que esperar a que se realicen los estudios necesarios que permitan la comercialización de este medicamento.