La neblina y el humo en Madrid proviene de un incendio en Portugal
Madrid ha tranquilizado a los ciudadanos que, "alertados por olor a incendio y humo", han realizado hasta 380 llamadas al 112
Se trata de un incendio en Portugal: en estos momentos no hay ningún foco en la región, detalla la Comunidad con una imagen de satélite
El humo proviene del incendio originado junto a la frontera con Portugal, en la localidad de Lajeosa de Raia, al este de Salamanca
La Comunidad de Madrid ha tranquilizado este martes a los ciudadanos que, "alertados por olor a incendio y humo", han realizado numerosas llamadas al servicio de emergencias 112 durante esta mañana. Según ha apuntado la institución desde redes sociales, "se trata de un incendio en Portugal". En estos momentos "no hay ningún incendio" en la región, han detallado en su publicación.
La Comunidad de Madrid ha registrado 380 llamadas por el humo y la neblina
Muchos usuarios han reaccionado esta jornada en redes sociales al cielo que se presentaba en la Comunidad de Madrid, cubierto por una neblina blanca que dificultaba la vista. Las autoridades han destacado esta tarde que "finalmente ha habido 380 llamadas sobre esta circunstancia", sobre todo de "09:00 horas a 15:00 horas". Asimismo, han difundido una imagen de satélite para aportar una perspectiva de lo ocurrido.
El humo en la Comunidad de Madrid proviene del incendio originado en Lajeosa de Raia, Portugal
El humo y el olor a incendio proviene del fuego originado junto a la frontera con Portugal, en la localidad de Lajeosa de Raia, al este de Salamanca.Varias localidades de Castilla y León también han despertado en circunstancias similares a la capital. Numerosos ciudadanos han compartido fotografías en redes sociales, mientras se preguntaban si había algún incendio cercano.
Las circunstancias meteorológicas han facilitado la llegada del humo a Madrid desde Portugal
Los expertos apuntan a que este fenómeno se debe a las circunstancias meteorológicas, que ayudan a que el humo se desplace hasta puntos como Madrid. El aire se eleva hasta la atmósfera y el humo avanza con mucha velocidad.