Más de 1.200 profesionales de emergencias han participado este fin de semana en un gran simulacro en la madrileña base aérea de Cuatro Vientos, que se ha convertido por unas horas en escenario ficticio de tres situaciones críticas con explosiones, tiroteos, incendios y secuestros. La iniciativa forma parte de las XXV Jornadas Municipales sobre Catástrofes, con las que se busca mejorar la coordinación y el trabajo de los servicios de emergencia.
Durante algo más de una hora, los distintos efectivos desplegados en el lugar han trabajado para controlar la situación y garantizar la seguridad con un hotel y un supermercado en llamas, múltiples víctimas y heridos, un autobús con rehenes y varios terroristas que han logrado huir del lugar.