Eutanasia

La “buena muerte” de Nacho: el mensaje de un hombre a punto de recibir la eutanasia

La “buena muerte” de Nacho: el mensaje de un hombre a punto de recibir la eutanasia
Un último y necesario deseo. Informativos Telecinco
  • “Haciendo uso de mi derecho a elegir esta forma de morir, tengo programada mi eutanasia, mi buena muerte", afirmaba Nacho

  • El paciente en su mensaje reclamaba también más medios para los sanitarios de paliativos que le han cuidado en sus últimos días

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AlicanteNacho dejó un importante mensaje pocos minutos antes de recibir la eutanasia donde celebraba la vida y la libertad de haber podido elegir, pero también más medios para los sanitarios de paliativos que le cuidaron en sus últimos días.

“Haciendo uso de mi derecho a elegir esta forma de morir, tengo programada mi eutanasia, mi buena muerte…Quiero reivindicar también más ayuda para el servicio de paliativos cuyo personal suple con su esfuerzo los escasos recursos de los que se dispone”, decía parte del mensaje.

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Cuando a la vida le quedaba poco tiempo, la voz de Nacho se hizo más fuerte. “He comprobado lo que estos equipos de excelentes profesionales, trabajando con los medios justos, han hecho por mí para mejorar mis condiciones de vida”.

Nacho en el hospital
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Un testamento de justicia

El hombre dedicó parte de sus últimas horas de vida a escribir en el Hospital General Universitario Doctor Balmis de Alicante más que una carta su testamento de justicia.

“Yo, que llego en buenas condiciones mentales, quiero levantar esta bandera por ellos, que no pueden hacerlo". No quiso esperar e Ignacio se marchó en plenas facultades antes de ser vencido por la incapacidad.

“Él tenía muy claro que no iba a soportar ni dolor, ni unas condiciones de vida que él no considerara dignas”, asegura Braulio, buen amigo de Nacho, quien grabó el último y más íntimo capítulo de su vida.

Escribió su historia los últimos meses de hospital. “Así empieza el libro, ‘Metástasis ósea, ósea, metástasis'”.

Ignacio se fue feliz sabiendo que había puesto el punto final que él eligió. “¡Viva la vida!, ¡viva la libertad!” exclamaba desde la cama de hospital.

Nacho durante una excursión