"Aarón es un niño muy trasto y se cae mucho. A mí se me sube a la chepa, la manera de educarlo Jose es darle algún cachete en el culo y cogerlo del brazo, pero es incapaz de hacerle daño, le quiere mucho, creo que lo que pasó es que ese día a Jose se le fue la mano". Estas son las palabras -que publica El Periódico- de la madre del niño que murió el pasado septiembre de las palizas que le daban en su casa en Elche.
Ella y su pareja –que no era el padre de Aarón- llevaron al niño al hospital muy malherido con la ayuda de una vecina. Los médicos enseguida vieron que algo pasaba y activaron el protocolo. La pareja dio tres versiones sobre lo que le había pasado al pequeño de dos años. Primero que se cayó en la bañera, después que unos encapuchados lo secuestraron y por último, que unos niños le habían pegado. Finalmente, ambos reconocieron los hechos.
Según relataron él le propinó presuntamente un fuerte puñetazo en la cabeza al menor que le dejó inconsciente. Sin embargo, la autopsia revela que el niño murió por estrangulamiento.
La madre de Aarón le pidió a la policía, según cuenta el citado diario, que no trataran mal a su pareja. “Es buena gente, cada uno tiene su manera de educar".
A los policías les “sorprendió su frialdad, estaba tranquila, se sentó al lado de su pareja, le cogió la mano y le dio un beso". Otro agente, cuenta El Periódico, señaló que la mujer "se mostró más preocupada por la situación de ella y su pareja que por la del menor".
El padrastro de Aarón contó en el juzgado que fue “a despertar al niño, se hizo pis. Yo le dije que eso no se hacía y fui a buscar la leche. Cuando volví, se había vuelto a mear. Entonces le di en el culo y después perdí la razón y le di en la cabeza. Él hizo un gesto como de dejar de respirar".
El hombre, en prisión preventiva al igual que la madre, dijo que era “la primera vez que golpeo al niño así de esa manera, las otras veces fueron de menor intensidad (…) No le doy manotazos a diario, solo cuando veo que ha hecho algo mal" como rechistar, tenía un mal gesto o se hacía pis.