Así ha cambiado de imagen Rodrigo Lanza, en el banquillo por matar a un hombre que llevaba unos tirantes con la bandera de España

  • Tras una pelea en un bar de Zaragoza, la víctima murió cuatro días después en el hospital

Hoy comienza el juicio por el llamado "crimen de los tirantes". En el banquillo, Rodrigo Lanza acusado de matar a otro de una paliza en un bar porque llevaba unos tirantes con la bandera de España. Ocurrió en Zaragoza hace dos años y un jurado decide desde hoy si se trata de un crimen ideológico. Hay que destacar el cambio de look del acusado, que ha pasado de las rastas a la camisa y la americana.

Rodrigo Lanza lleva casi dos años en prisión preventiva y hoy se sienta en el banquillo de los acusados. Lo ha hecho con una imagen muy distinta. En 2017 cuando murió Víctor Laínez llevaba la cabeza medio rapada, rastas y dilataciones, hoy ha llegado ante el juez con chinos, camisa y americana, además de pelo corto engominado.

Era diciembre de 2017 cuando Lanza entró a un local de copas de Zaragoza donde se encontró a Laínez, de 54 años. Ataviado con unos tirantes con la bandera de España, Laínez llamó la atención del joven chileno y ambos comenzaron una discusión en el bar que acabó con la muerte del Víctor, cuatro días después, por los fortísimos golpes recibidos.

Hasta ahí están de acuerdo los dos abogados, sin embargo, la acusación sostiene que fue Rodrigo quien comenzó la disputa llamándolo facha y fascista, y que lo agredió, y asesinó, por su posicionamiento político. Los testigos sostienen también esta versión, alegando que la víctima fue atacada por la espalda.

La defensa, que pide la absolución, mantiene lo contrario. Que fue Laínez el que empezó la discusión diciéndole que se fuera a su país y que Lanza, bajo los efectos del alcohol, solo lo agredió en defensa propia cuando el hombre se acercó a él con una navaja. El acusado asegura también que lo mató por pánico y por todo el alcohol que había consumido, y que no vio los tirantes.

El arma del crimen nunca se encontró, pero todo apunta a que fue un puño americano.

Hoy ha comenzado el juicio en la Audiencia Provincial de Zaragoza con la formación del jurado. La Fiscalía pide para el acusado 25 años de prisión por un presunto asesinato por odio, con ensañamiento y alevosía; lo máximo antes de llegar a la prisión permanente revisable.

Rodrigo Lanza ha roto a llorar en varias ocasiones, como hizo la familia del guardia urbano al que dejó tetrapléjico y sin habla de una pedrada mientras participaba en el desalojo de un edifico en Barcelona.