Un hombre, a punto de morir por la mordedura de una víbora que había decapitado

Informativos Telecinco 08/06/2018 19:27

El matrimonio Sutcliffe organizó una barbacoa en su casa de Texas (Estados Unidos), por lo que realizaron labores de jardinería en el patio de su casa antes de que llegaran sus familiares. Mientras Milo cavaba un foso, divisó una serpiente de cascabel de más de un metro que se deslizaba por el jardín.

Jennifer Sutcliffe no pudo reprimir un grito y alertó a su marido, quien cortó la cabeza del reptil con una pala, como recoge The Independent. La mujer volvió al interior de la casa pensando que la pesadilla ya había terminado, pero a los diez minutos escuchó gritar a su marido.

Mientras Milo recogía los restos de la serpiente, la cabeza del animal se revolvió y le mordió la mano. Debido a que esta serpiente es la más venenosa de Estados Unidos, la mujer llamó rápidamente al servicio de emergencias porque Milo perdía la visión y presentaba síntomas de shock séptico y hemorragia interna.

Los médicos le indujeron el coma y le inyectaron 26 dosis de antiveneno, cuando lo habitual son “entre dos y cuatro dosis”.

De acuerdo con testimonios de expertos, las serpientes pueden morder hasta una hora después de su muerte y, durante este tiempo, los reptiles decapitados también se levantan en una posición “de ataque”.