Las restricciones para todos los vehículos que no sean cero emisiones o transporte público entrarán en vigor este viernes, aunque las autoridades de Madrid comenzarán a multar a partir de enero del próximo año. Los conductores que infringan la prohibición de acceso tendrán que pagar 90 euros de multas.
Agentes de policía controlarán cualquier violación de la normativa de Madrid Central y un control más exhaustivo, que se realizará a través de cámaras de seguridad.
Los vehículos de las personas empadronadas podrán acceder y circular libremente a Madrid Central y sus calles internas estacionar en su barrio; también podrán hacerlo los vehículos con etiqueta ambiental CERO emisiones; los vehículos con etiqueta ECO podrán acceder y aparcar durante un máximo de dos horas; y aquellos con etiqueta B o C podrán acceder siempre que vayan a un párking o plaza de garaje particular.
Los vehículos sin etiqueta ambiental no podrán acceder a Madrid Central, excepto que sean de residentes empadronados en Madrid Central, invitados de estos, personas con movilidad reducida, servicios esenciales, titulares de plazas de garaje.
Las motos están incluidas en la normativa excepto que no tendrán la obligación de ir a un párking o garaje entre las 7.00 de la mañana y hasta las 22.00 horas.