Menos de seis segundos es el tiempo que ha necesitado Max Park para alzarse con la victoria en el Campeonato Mundial de Cubos de Rubik, esos rompecabezas imposibles para algunos y que para otros, sin embargo, casi se resuelven de un vistazo.
La competición este año se ha celebrado de manera online debido a la pandemia de coronavirus. Pero el torneo sigue demostrando su espectacularidad desde casa con algunos movimientos a velocidades imposibles. Max Park, el ganador de este año, ha batido el récord del mundo, superando por 14 centésimas de segundo al australiano Feliks Zemdegs, ex doble campeón en ediciones pasadas.
Porque aquí el tiempo vuela, y no siempre se trata de completar las caras del cubo como hemos visto mil veces. También está la modalidad en la que los participantes se enfrentan a patrones aleatorios, todo un desafío al alcance sólo de las mentes más entrenadas.