Un colegio de Cáceres prohíbe la entrada a dos niñas: sus padres negacionistas rechazan la mascarilla

  • El uso de la mascarilla es obligatorio en espacios cerrados desde los 6 años

  • El consejero de Educación subraya que prevalece el derecho a la salud

  • Los profesores se negaron a dar clases si se les permitía la entrada sin mascarilla

El plantón de los profesores del colegio de Cáceres dio resultado. Finalmente, las autoridades docentes han prohibido a las dos niñas asistir a clases sin mascarilla, como pretendían sus padres, negacionistas del coronavirus. El consejero de Educación ha explicado que el prevalece el derecho a la salud

Las niñas del colegio Alba Plata de Cáceres tendrán prohibido acceder al centro educativo sin la obligada mascarilla, una norma establecida para prevenir los contagios en el ámbito escolar. En cambio, recibirán "atención educativa" desde su casa, según ha informado el secretario general de Educación, Francisco Javier Amaya.

"No estamos ante un alumno especialmente vulnerable que como consecuencia de la pandemia no pueda asistir a clase, sino que estamos ante una decisión de la familia", ha señalado el secretario general, quien ha matizado que las alumnas recibirán una atención educativa que permita "mantener el seguimiento" y que no se queden "descolgadas" del sistema educativo.

Esta decisión, que es extensible al conjunto de los alumnos de la comunidad autónoma, se ha producido tras la polémica suscitada en el citado colegio cacereño, por el malestar generado en la comunidad educativa por la postura "tajante" de los padres de las alumnas, de 3º y 5º de Primaria, que se negaron a dar clases si se les permitía acceder al aula sin la mascarilla.

Prevalece el derecho a la salud

En una rueda de prensa convocada este mismo miércoles en la sede de la Consejería de Educación, Amaya ha explicado que se trata de una decisión "muy compleja", adoptada tras poner el asunto en manos de los servicios jurídicos de su departamento y de la Abogacía General, en tanto que se produce una "fricción" entre dos derechos fundamentales, como es el de la educación de las niñas, así como de la salud del conjunto de la comunidad educativa del centro.

En la rueda de prensa el consejero de Educación además de subrayar que prevalece el derecho a la salud , ha detallado el conjunto de decisiones adoptadas por la consejería sobre este caso que, ha reconocido, ha "alterado el normal desarrollo" de la comunidad educativa del colegio, desde que el pasado 9 de septiembre tuviera conocimiento de la postura de los padres de las alumnas.