La demoledora versión de Jonas, el niño superviviente del doble crimen de Adeje que acusa a su padre

  • Jacob huyó cuando vio a su padre matar a su madre y a su hermano a pedradas en una cueva de Adeje, Tenerife

  • Thomas Handrick, acusado de matar a su mujer y su hijo, dice que fueron atacados por unas "piedras voladoras"

  • El acusado, Thomas Handrick, se enfrenta a prisión permanente revisable

Hoy va a continuar en Santa Cruz de Tenerife el juicio por el crimen de Adeje. En la jornada de ayer, el acusado de matar a pedradas a su mujer y a uno de sus dos hijos pequeños, aseguró estar arrepentido. Su defensa lo atribuye a un trastorno mental. Thomas Handrick se enfrenta a prisión permanente revisable. Su otro hijo, Jonas, que logró huir de las garras de su padre, aseguró entonces que vio como su padre agredió a su madre y a su hermano.

Jonas, el menor de siete años que huyó de la cueva de la zona alta de Adeje donde presuntamente su padre asesinó a su madre y su hermano mayor, estaba "asustado" y tenía "miedo" cuando fue encontrado. Así lo han expuesto varios testigos durante la sesión del juicio este martes contra Thomas Handrick, al que la Fiscalía solicita 51 años de cárcel y presión permanente revisable por dos delitos de asesinato y otro en grado de tentativa.

Unas "piedras voladoras", culpables de las muertes de Silvya y Jacob

Thomas Handrick explicó en la sesión del martes del juicio que unas misteriosas piedras voladoras provocaron las muertes de su mujer y su hijo y que él solo intentó devolver las piedras al lugar de donde venían.

Jonas vio a su madre con la boca llena de sangre

Jonas, el hijo superviviente ha desmontado la versión de las extrañas piedras. Annelis, la intérprete holandesa que custodió a Jonas una noche en su casa, ha comentado que el niño le contó que los padres habían discutido tras una jornada de pic-nic con motivo de la festividad de Pascua y empezó a "ensañarse" con la madre en la cueva, agrediéndola con piedras.

Ha dicho que su madre "estaba en el suelo con la boca llena de sangre, muy malherida, sin dientes en la boca", y cuando vio que su padre también agredía a su hermano mayor, Jacob, salió huyendo y le dijo: "Mejor la vida que los regalos de Pascua".

Asimismo, ha apuntado que el niño tenía "mucho miedo" del padre y no quería ir con él, no le "quería ver", al tiempo que señaló que el acusado sí preguntó por su hijo en la comisaría de la Policía Local y estaba "muy nervioso".

La pareja de hermanos que encontró al niño vagando por la zona de La Quinta ha señalado que estaba "asustado, fuera de sí y sonrojado", escondido detrás de un tunera, y tras hablar con un vecino alemán de la zona, les comentó que "sus padres se había enfadado" y si podían llevarlo a su casa, pero al no encontrarla, lo llevaron a la Policía Local.

El testimonio de la madre de Thomas Handrick

La madre del acusado ha apuntado que aunque la pareja se estaba separando se llevaban de forma correcta aunque "no se comunicaban como antes" y él tenía una "buena relación" con sus hijos pese a que por sus dolencias derivadas de una mala operación no podía jugar mucho con ellos. Ha dicho que nunca pensó que sus nietos estuvieran en peligro por estar cerca de su padre. "No temía por ellos, él estaba a gusto con ellos", ha destacado.

Mónika Handrick ha recordado que su hijo quedó "en schock" cuando se enteró del suicidio por ahorcamiento de su padre, pero con apoyo de sus amigos del instituto salió adelante, y "no era agresivo", se esforzaba en sacar buenas notas y hacer las cosas bien como le pedía su madre.

Lo que sí le "afectó muchísimo", ha señalado, fue la operación que no salió bien porque le hicieron daño en un nervio y acabó finalmente con una incapacidad laboral. "Cambió mucho con la operación, tenía dolores constantes, tomaba medicación, y se encerró en sí mismo, los amigos ya no estaban, eso a un joven le afecta y tuvo repercusiones en la familia", ha señalado.

Ha indicado que el primer hijo, Jacob, "fue buscado", no así Jonas, dado que ya estaba enfermo y no podía encargarse de sus cuidados, pero lo aceptó "bien".

Además, ha revelado que la madre no quería que volara con sus nietos a Tenerife para visitar al padre y que Thomas no podía hablar por teléfono con sus hijos.

"A mí me dejaba ver a mis nietos, pero cuando ella decía, y cada vez, de forma menos frecuente", ha indicado sobre su relación con su nuera, Silvya, que prohibió un viaje de los niños en Navidad a la isla y lo pospuso para Semana Santa. "Él estaba triste por vivir en Tenerife sin ellos pero el clima le venía bien", ha afirmado.

Mónika ha comentado que desconocía la situación económica de la familia, solo que Thomas invirtió en unos edificios en Halle pensando en el futuro de sus hijos, y reconoció que habían entrado a robar en su casa en Adeje mientras se encontraba en prisión pero no sabía que se llevaron 160.000 euros de una caja fuerte.

El hombre de origen alemán que encontró los cadáveres ha confirmado que no había cobertura de teléfono móvil en la zona y que al lugar se llega por un camino ancho y señalizado para senderistas.