Una pareja de jubilados lleva días acampando en la puerta de un chalet para echar a sus inquilinos
El chalet es de su hijo, quien necesita el dinero
Alquiló el chalet mediante un acuerdo verbal
Una pareja de jubilados lleva días, acampada en la puerta de un chalet de Tarragona pidiendo ayuda para echar al inquilino que no paga. La casa es de su hijo y, dicen, que no pueden recuperarla.
Pancarta en mano, Amparo y Antonio piden ayuda para liberar la casa de su hijo de unos inquilinos morosos. Hace dos años, su hijo, alquiló su chalet, sin contrato, mediante acuerdo verbal a una familiar de la que era su novia. Al poco tiempo esta inquilina y su marido dejaron de pagar.
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Amparo nos cuenta que "Llevan 20 meses sin pagar nada; que la dejan para poderla alquilar." Muchos de los vecinos se han enterado así de la situación y han decidido ir a apoyar y dar su ánimo a la pareja.
El hijo de la pareja, que ahora vive en Madrid con sus dos hijos, lleva 5 meses sin poder pagar la hipoteca del chalet, situado al sur de Tarragona. Por eso hace 5 días decidieron a modo de protesta plantarse cada tarde delante de la casa.
Nos cuentan cómo el primer día "cogieron agua sucia de la piscina y nos la echaron por la espalda". La inquilina asegura que dejó de pagar solo en enero porque les cortaron el agua y piden "que demuestren con papeles, porque nosotros sí podemos demostrar que no estamos de okupas".
En estos casos (por impago de alquiler - desahucio en precario) la justicia suele tardar entre 6 y 12 meses en actuar, pero el dueño del chalet lo tiene difícil: sin contrato, sin papeles, y a 540 km de distancia.