La juez instructora ha abierto un sumario por los delitos de homicidio y tenencia ilícita de armas en relación con este caso, informó una portavoz del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV). Horas antes el hermano de Rocío era trasladado hasta la casa familiar donde fue hallado el cadáver de la joven para hacer una nueva reconstrucción de los hechos. También fue llevado hasta el lugar en el que se halló el arma.
El suceso ocurrió el pasado 4 de abril en el número 10 del Camí de Coves de Alfaz del Pi, cuando la madre abandonó el domicilio para abrir un bar de su propiedad. Al volver halló el cadáver tendido en la cama del dormitorio de la menor, que recibió dos disparos procedentes de una escopeta.
Una vez descubierto el cadáver, el único hermano varón de la víctima (Ramón) la llevó en su coche al hospital comarcal de la Marina Baixa, en Villajoyosa, aunque allí no se pudo hacer nada por salvarla.
La confesión
Ramón y su padre fueron detenidos el martes. Este último quedó en libertad sin cargos, después de que su hijo confesara ser el autor de los disparos.
Antes de ser puesto en libertad, el padre pasó una noche en los calabozos de la Guardia Civil de San Vicente del Raspeig, mientras que su hijo fue trasladado desde el cuartel del Instituto Armado de Alicante hasta los juzgados de Benidorm.
Este miércoles, el presunto autor de los disparos condujo a los agentes de la Guardia Civil a un barranco, donde se hallaba escondida el arma de fuego, lo que parece haber facilitado la investigación.
El móvil
Un coche, un mensaje de teléfono y una coartada sin consistencia han terminado delatando al hermano de Rocío.
"Cuando haga justicia y desaparezca ya me echarás de menos". Ramón mandó este mensaje a una ex novia dos días antes de su detención. Los investigadores pensaron que pensaba suicidarse. Sin embargo, cuando fue detenido dijo que tenía pensado entregarse.
La jueza considera que es un experto en el manejo de armas a pesar de que él insiste en que sólo quería asustar a su hermana y que se le disparó el arma.
Los investigadores aseguran que no hubo conversación entre ellos porque Rocía dormía. Él supuestamente le disparó a bocajarro. El primero le dio en la axila y el segundo le destrozó la cabeza. Los dos disparos con trayectorias distintas demuestran que no se efectuaron simultáneamente.
El análisis de la ropa permitirá determinar si las manchas de sangre de la camiseta corresponde a las salpicaduras de los tiros o a haber tenido el cuerpo de Rocío en brazos. Él dice que llevó a su hermana muerta en el maletero porque al ser un todoterreno era más rápido el traslado.
EPF/RSO