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200 familias de Catarroja siguen recibiendo comida para subsistir nueve meses después de la DANA

Colas para recibir alimentos. Telecinco.es
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268 días después de la DANA que el pasado 29 de octubre arrasó decenas de municipios valencianos, 200 familias siguen recibiendo ayudas en forma de alimentos para poder comer a diario. "A nosotros nos ha pegado un palo grande. Económicamente nos hemos quedado muy mal", relata Honorio, un jubilado afectado por las inundaciones, entre lágrimas.

Una ayuda que se distribuye gracias a Estem Solidarios en Acción, una asociación creada tras la riada para mejorar la vida de los damnificados. Desde la ONG hacen un seguimiento de las familias que solicitan alimentos para confirmar que los necesitan. "Lo han perdido todo, incluso la vida de algún miembro. Otros han perdido la casa, el coche o el trabajo. Nosotros contrastamos los datos que nos aportan y se les visita para ver si está todo correcto", señala Pura Sanz, presidenta de la asociación, que explica que "hay gente que viene solo a por agua, pero hay otros que vienen a por todo. Les damos productos de higiene, de limpieza, ropa o calzado, según nos van llegando las donaciones".

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Tonica lo perdió todo en la DANA. El agua arrasó su bajo. Jubilada y con una pensión mínima, no podía pagar el seguro de hogar y se quedó hasta sin ropa. "Si no fuera por la gente buena que hay no podría haber sobrevivido", asegura emocionada esta mujer, que explica que la tragedia "te deja una herida que de vez en cuando sangra".

Un dolor que también ayudan a paliar desde la asociación. "El recibirlos, darles un abrazo es también darles vida", señala Pura.

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Una ayuda psicológica que también ha encontrado Mari, pero ella trabajando como voluntaria. La noche de las inundaciones, esta mujer perdió a su marido. "Mi hija se puso en contacto con la asociación y me convenció para venir. Me ha ayudado mucho. Hago lo que se necesite porque sigue viniendo gente porque lo necesita. Ademas, todos somos una familia", cuenta Mari Villanueva.

Como Mari, muchos voluntarios trabajan sin descanso porque su labor sigue siendo necesaria. "La gente piensa que porque han pasado nueve meses se ha vuelto a la normalidad, pero no es así", asegura la presidenta de la asociación.