Alejandra Rubio dice adiós a su melena pelirroja: su nuevo cambio de look

Alejandra Rubio ha decidido dar un cambio a su imagen. La hija de Terelu Campos ha abandonado la melena cobriza que la ha acompañado durante las últimas temporadas para empezar a lucir otra mucho más natural y parecida a su color de pelo real. La colaboradora de 'Viva la vida' vuelve a sus raíces y ya no es pelirroja.

A la nieta de María Teresa Campos le encanta jugar con su imagen. Desde que cumpliera la mayoría de edad, la joven ha ido tiñendo su melena en multitud de ocasiones y la hemos visto con el cabello desde el negro más azabache hasta el rubio platino.

Ahora, quizás cansada de la esclavitud que supone tener que estar decolorando y retocando el cabello cada pocas semanas para conseguir que esté siempre perfecto, la influencer ha decidido recuperar su color de pelo natural. Así, gracias a la ayuda del estilista Roberto Alegre, colorista especializado en rubios que se define a sí mismo como "alquimista" del color, ha conseguido un castaño ligeramente cobrizo, que continúa aportando luminosidad a su rostro y se asemeja mucho más a su tono natural.

Alejandra, a quien se le notaban las raíces de su pelo desde hace un par de semanas, parece estar contentísima con su cambio de look. A través de sus redes sociales, la tertuliana ha querido presumir de su nueva melena, que ha recuperado su brillo y luce mucho más sana.

La joven lleva años confiando en Roberto Alegre. De hecho, el estilista, que asegura tener su propia técnica para conseguir el color perfecto, es el artífice de los cambios de look más radicales de Alejandra Rubio.

A lo largo del último año, la nieta de la que fuera la reina de las mañanas de la televisión ha lucido distintos tonos de rojo. De empezar con uno intenso, pasar por un naranja vibrante a terminar con un 'strawberry blonde', muy de moda en las últimas temporadas. Ahora, Alejandra Rubio abandona esta tonalidad para apostar por el marrón, color con el que se encuentra realmente favorecida y con el que esperamos verla durante varias temporadas. ¿Podrá resistirse a cambiar otra vez de look o acabará visitando el salón de Roberto Alegre para pedirle de nuevo algo completamente radical y rompedor?