Verdeliss, asustada tras el 16 cumpleaños de Aimar: "Podría emanciparse"

Verdeliss lleva años convertida en una instamami. A través de sus redes, la influencer navarra ha compartido el día a día de su vida y la de sus hijos, a quienes hemos visto crecer a través de sus diferentes perfiles sociales. La exconcursante de 'GH VIP', que se encuentra esperando a su octavo bebé ha celebrado esta semana el 16 cumpleaños de Aimar, su primogénito. Un acontecimiento que ha vivido entre una inmensa felicidad y algo de susto, pues la ex gran hermana estaría muy preocupada por la decisión de su hijo mayor.

Aimar fue el primero en llegar. Muy probablemente, cuando Estefanía Unzu se quedó embarazada de él no esperaría formar con Aritz una familia tan numerosa como la que han creado. Tras él lo hicieron Irati, Laia, Julen, las mellizas Eider y Ane y la pequeña Miren, a quien pronto se sumará una nueva hermanita.

La llegada al mundo del joven puso la vida de la que fuese la primera concursante de la historia de 'Gran Hermano' en entrar embarazada a la casa de Guadalix de la Sierra completamente patas arriba.

Aimar tiene ahora 16 y su vida podría cambiar radicalmente dentro de poco. Ha crecido mucho y las famosas 'escaleritas' que les encanta crear en sus retratos fotográficos ya no son lo que eran, pues el mayor de los hermanos ahora es más alto que la propia Verdeliss y pronto podría superar también a su padre.

Para la empresaria Aimar sigue siendo su 'bebé', sin embargo, el joven adolescente está más cerca de formar su propia familia que de serlo. Una realidad que asusta y mucho a la de Pamplona, que no puede evitar ver cómo su niño se convierte en hombre por momentos.

"Cursa bachillerato, podría emanciparse y en países como Estados Unidos tendría edad para sacarse el carnet de conducir", escribe su madre en un post en el que se puede ver lo mayor que está el adolescente, quien además, podría tener una buena cantidad de dinero ahorrado que le permitiese pronto 'volar del nido', pues su madre se ha encargado de crearles cuentas bancarias e ingresar a cada uno de los niños una parte del dinero que generan al aparecer en sus publicaciones. "¿Cuándo voló así el tiempo?", se pregunta.

Aunque nada apunta a que el joven quiera irse de casa de sus padres, la realidad es que, legalmente, podría hacerlo recurriendo a la emancipación, figura administrativa que permite que el mayor de 16 años y el menor de 18 “pueda disponer de su persona y de sus bienes como si fuera mayor de edad”.

"Felicidades a mi primogénito… que 16 años atrás puso mi mundo patas arriba, pero me enseñó el sentimiento más infinito, puro y maravilloso: el amor de madre. Te quiero, Aimar", añade mientras le felicita.