El empresario y hermano de Rodrigo Rato, Ramón Rato, fallecía el pasado sábado 14 de enero en casa de su amigo, Jaime Peñafiel. El periodista, en su sección habitual en el programa ‘Sálvame’, visiblemente afectado, declaraba: “He perdido a la mejor persona de mi vida después de Carmen, ha estado en todos los malos momentos, en lo bueno da igual, lo puedes compartir con cualquiera, pero los malos solamente con algunos amigos puedes compartirlo” y explicaba que Ramón estuvo junto a él "en el momento más terrible de mi vida, la muerte de mi hija".
Jaime Peñafiel comentaba que por la amistad que les unía, Ramón Rato “venía mucho a mi casa, le gustaba, él murió en su casa que era la mía, la mía era la suya”. Al parecer, el sábado comieron y Ramón Rato “quiso echarse a la siesta porque acostumbraba”. Más tarde, antes de la cena “a las nueve de la noche estaba en su habitación, entré yo a llamarle y me lo encontré muerto”.
“Yo soy una persona que necesito a los amigos, que necesitaba a este amigo para vivir, la verdad que en esos momentos me bloqueé, no sabía ni qué hacer”, decía el periodista y por ello calificaba el momento que encontró a Ramón como "el más terrible, tan terrible como lo de mi hija a la que yo no vi, cometí el error de no verla".
Jaime Peñafiel y Ramón Rato han sido amigos durante más de cuarenta años, el periodista lo calificaba no ya como un amigo sino como “más que un hermano” y concluía definiéndose en esos momentos como "una persona huérfana, se puede ser huérfano de amigos".