Todo sucede en un bar muy popular de Sevilla. Unos camareros le impiden el paso a Jose Fernando porque ven que no está en buenas condiciones y acaba sucediendo lo que temían. El hijo de Ortega, fuera de sí, acaba tirando el inmobiliario del local y uno de los allí presentes no duda en llamar a la policía. “Tenía la cara desencajada”, asegura una mujer que presenció el altercado.

‘Sálvame’ ha podido hablar con una testigo: “Me pidió el móvil para llamar a su padre y pedirle dinero (…) se puso agresivo y a decir groserías”. Al parecer, Jose Fer no paraba de pedir dinero a todo el mundo y no se calmaba, pero finalmente pudo hablar con su padre y según esta testigo, le proporcionaron un número de cuenta.