Del distanciamiento al enfrentamiento: Los peores ‘golpes’ entre Kiko Rivera e Isa Pantoja

Kiko Rivera e Isa Pantoja ni se dirigen la palabra. Que su madre concurse en ‘Supervivientes’ y que coincidan en plató no les ha acercado, al contrario, les ha alejado y mucho. Según Mila Ximénez, el Dj ha tomado una decisión: no quiere saber “absolutamente nada” de su hermana pero ¿Qué ha pasado hasta ahora? Recordamos sus peores polémicas.

Fue una de las primeras. Isa Pantoja acababa de cumplir la mayoría de edad y había irrumpido en el mundo mediático con la noticia de su embarazo. Pasados los meses, Kiko Rivera se sentaba en un ‘Deluxe’ y hablaba de la situación de su hermana y criticaba al padre del niño, Alberto, diciéndole “mujeriego y sinvergüenza”. Entonces, Isa escribía en redes: “Ojos que no ven, corazón que no siente”, ante lo que su hermano decía la ya célebre frase: “Pues para ti cariño, vas a tener más cuernos que el padre de Bambi”.

Los años pasaron, Alberto nació y, aunque con problemas intermitentes, la relación se estabilizó de algún modo. Sin embargo, las cosas no tardaron en torcerse de nuevo y llegaron al punto de que los hermanos ni se saludaban. Fue en la Semana Santa de Sevilla, Kiko iba de la mano de Irene Rosales, la prensa le preguntaba si había podido encontrarse con su hermana y fue girar la esquina y encontrársela. Los hermanos estaban a cinco metros pero Kiko cogió su moto, su casco y se marchó no sin antes saludar a un conocido. La cara de Isa era un poema y en esa ocasión fue Alejandro Albalá, su entonces novio, quien le saludaba.

Ese mismo año, pocos meses después, Isa protagonizó una de sus portadas más duras. “No me siento igual de querida que mi hermano”, decía ella en ‘Lecturas’ y sus declaraciones provocaron toda una tempestad en el mundo Cantora.

Cuando nació Carlota, segunda hija en común de Kiko Rivera e Irene Rosales, hubo alguna que otra ausencia en el hospital. La relación del DJ e Isa tampoco atravesaba entonces uno de sus mejores momentos y ella no fue al hospital. Él quiso maquillarlo de cara a la galería, pero Paloma García Pelayo afirmó que Kiko le dijo a su hermana que no se molestara en ir… Sin embargo, el tiempo pasó y, ya en casa, tía y sobrina se conocieron.

El bautizo del hijo de Chabelita fue un cúmulo de polémicas. Lo único que sabíamos era la iglesia en la que iba a celebrase, pero jugaron al despiste con la prensa con el nombre del restaurante, más de un invitado (como Anabel Pantoja) acabó en el sitio equivocado, y hubo más de una ausencia: Kiko Rivera e Isabel Pantoja madre.

Kiko Rivera confesó durante su participación en ‘GH DÚO’ que tuvo un problema de adicciones. Hasta ese momento todo el mundo pensaba que había sufrido una depresión, pero el DJ contó la verdad en directo. Isa Pantoja intuía este problema, pero no la gravedad, y en una revista explicó que su madre le mintió contándole la misma versión que a la prensa.

En la misma entrevista salieron a la luz viejas polémicas de Isa y su hermano. Al parecer, cuando ella solo tenía 16 años, su hermano Kiko sospechaba que podría haber tenido relaciones íntimas y la llevó a un centro de salud para comprobarlo. Ella no quería entrar en detalles, pero Antonio Rossi los daba.

Y llegamos a la actualidad. Mientras Kiko Rivera e Irene Rosales concursaban en ‘GH VIP’, Isa Pantoja dio una exclusiva, hablaba de las adicciones de Kiko, de Irene Rosales… y a los aludidos no les gustó ni un pelo. Sorprendidos tras su salida, su relación quedó en 'stand by'.

El plató de ‘Supervivientes’ se convirtió en su lugar de reencuentro. Su madre Isabel Pantoja se estrenaba como concursante del reality, sus hijos estaban en plató y Jorge Javier Vázquez tuvo que mediar entre ellos. Sin embargo, Kiko le dejó algo claro a su hermana: es su debilidad, pero Irene es la mujer de su vida.

Y la cosa ha empeorado. Según ha contado Mila Ximénez en ‘Sálvame’, Kiko no quiere saber “absolutamente nada” de su hermana y esto se acaba de evidenciar en el plató de ‘Supervivientes’. Kiko confesaba que no se habla con Isa, ella le daba dos besos, pero él le dejaba caer que se los puede dar en otro sitio que no sea un plató…