En un momento de calentón, y tras recibir un misterioso mensaje, Mila Ximénez dijo que le importaba “una mierda” la boda de Belén Esteban y su topo. La colaboradora aseguró que su compañera no se fiaba de ella y sus palabras le han pasado factura.
Mila ha adelantado que no acudirá a la entrevista que Belén Esteban dará en ‘Sábado Deluxe’ en las próximas horas aunque ha explicado que no está enfadada con ella: “Ayer hice un comentario que no fue con ira, simplemente me he dado cuenta de que no soy una persona de confianza para Belén”. La colaboradora reconoce estar “triste” y “dolida” y ha querido dejar claro que jamás traicionaría a un compañero.
Además, Ximénez y Belén han hablado en privado y ambas han estado de acuerdo en que tienen una “conversación pendiente”: “Lo que tenga que decirle a partir de ahora, va a quedar entre ella y yo”. Aun así, Mila ha mantenido que no quiere tener problemas con su compañera, a la que quiere “mucho”, y no ha podido contener las lágrimas en plató: “No puedo más”.
Mila se ha derrumbado en directo, confesando que está “muy cansada” y “agotada” de tanta polémica en el programa: “Parece que soy el demonio de Tasmania, estoy harta de que se saquen mis malos tonos cuando todo el mundo grita”. Una tensión acumulada que ha hecho que la colaboradora esté al límite: “Se acabó, a partir de ahora voy a tener un perfil bajo”.