Nissy enloquece al no poder hacerse su zumo por la mañana: "Sácame un ojo, pero no me quites mis naranjas"

  • Nissy descubre que alguien le ha quitado sus naranjas al despertarse

  • La melliza estalla contra la casa: "Tiemblo por las naranjas, por mi naranja mato"

  • Cora termina rebuscando en la basura para tratar de encontrar respuestas

Comenzaba un nuevo día en 'La casa de los secretos' y los concursantes se preparaban sus desayunos. Rafa y Carmen cogían varias naranjas para hacerse un zumo. Otros cuantos también cogían la que les correspondía. Pero Nissy no ha llegado a tiempo: "Me levanté contenta, llego y veo que no hay ni kiwis ni naranjas, nada, han arrasado con todo".

La melliza se dirigía a 'El Cubo' para desahogarse: "Para mí las naranjas son intocables, tiemblo por las naranjas. Igual que la gente que es adicta al café, yo soy adicta a mi zumito de naranja. Y ya pues me pongo chunga".

Pero no solo ha descargado su tensión en 'El Cubo'. Nissy se ha despachado a gusto en el jardín, ante la mirada atenta de todos sus compañeros: "Yo no tomo café, no tomo colacao, me tomo mi zumo de naranja por la mañana, siempre, y me cojo una. Estoy harta".

"Sácame un ojo, pero no me quites mis naranjas, mato por mis naranjas". Después de estas declaraciones de Nissy, estaba claro que la cosa no se iba a quedar así. Como una flecha, se ha ido directa a Rafa: "Vamos a ver, tú te haces zumos todas las mañanas, ¿de dónde sacas las naranjitas?". Y después de Rafa, le ha tocado a Carmen, que ha salido huyendo.

El jueves, durante la gala, todos los concursantes podrán ver el vídeo en el que Carmen y Rafa se hacen zumo con varias naranjas y descubrirán así quiénes han sido los ladrones, aunque ya tienen sus sospechas. La situación llegó a ser tan extrema, que a Cora solo se le ocurrió una manera de destapar el enigma.

Cora termina rebuscando en la basura

Tras un sinfín de discusiones y el llanto desconsolado de Virginia por no soportar este tipo de situaciones, Cora decidía volver a preguntar a Rafa, que reconocía haber cogido tan solo una de más. Las cuentas seguían sin salir, así que no le ha quedado otro remedio: Cora se ha puesto a rebuscar en la basura. Y entonces sí, hay cuatro pieles de naranja de sobra que nadie reconoce haberse comido.