Barrio muere mientras salva la vida de Cata

TELECINCO.ES 04/12/2009 14:06

Mejía confuso, llora la muerte de su hermana, tomando tequila para consolarse, "te juro por esta patroncita, mi Dani, que esta puta víbora va a pagar con su sangre negra lo que te hizo". Quiere hacer su propia justicia, pero le para los pies su fiel amigo Pancho, no quiere que cometa ningún error, "matar a cara descubierta a esa chica es una locura y, no voy a dejar que lo intentes". El sicario intenta disuadirlo, hay que vengar su muerte pero con la mente fría, de otra manera. Bebe Mejía idea el plan perfecto , contrata a dos nuevos sicarios que tendrán que ir al local y secuestrar a Cata y, traérsela al 'narco'. Después será él mismo quien se encargue de matarla. Pero nunca pensó lo que esa noche podría llegar a suceder en el Ginger.

Ya muy entrada la noche, Mejía y Sandra salen del local dispuestos a abandonar el lugar para no levantar sospechas, al otro lado de la acera el inspector Barrio está observando todo lo que está ocurriendo. Desde que ayudó a Cata a salir de la cárcel se siente muy unido a la joven, además también desde que su hija Sandra le contó que se había convertido en la chica del narcotraficante, el inspector no entendía los motivos que le habían llevado a tener esa vida. Al principio, pensó que la culpa la tenía Jessi, que la meretriz la obligaba a prostituirse pero después se dio cuenta que realmente su hija había escogido vivir así y que no podía hacer nada. Pero sí podía deshacerse de Guillermo Mejía. Y allí se encontraba en esa fatídica noche, delante del Ginger.

Cata y Jessi como siempre salen juntas del local para dirigirse a casa, pero por detrás se les acercan los dos sicarios. Barrio se da cuenta y sale de su coche, el sicario intenta disparar a Cata pero se adelanta el inspector y le mata, pero con el segundo matón no tiene tan suerte y le hiere de muerte, aunque antes también le dispara y salva a Cata y a Jessi. Las dos jóvenes asustadas se tuvieron que refugiar en uno de los portales cercanos al Ginger cuando comenzó el tiroteo. Cata corriendo se acerca a Barrio que está apoyado en el coche, casi no puede articular palabra, está gravemente herido de bala. La joven grita a Jessi para que llame al 112, pero antes de morir el inspector consigue decir a Catalina que "esos hombres trabajan para Mejía. Mejía se ha enterado de que tú has matado a su hermana. Sandra, mi hija...". Catalina corre peligro, Sandra la ha delatado y Mejía no tardará en encontrarla.