Historia de una ruptura anunciada

ELENA VILLEGAS 22/10/2008 13:34

La historia de amor entre Cris y Alberto ha sido corta, pero intensa. Se conocieron en la Escuela de Arte Dramático, que ella estuvo a punto de abandonar porque creía que se reían de ella. Él le demostró que no era así y que podía llegar a ser una buena actriz. Tras intentarlo varias veces, consiguió que Cris le acompañara a un casting por parejas para un anuncio de magdalenas; pasaron la primera prueba y la emoción del momento arrancó la pasión y se dieron su primer beso.

La alegría, sin embargo, se transformó en desolación y vergüenza cuando, en la segunda prueba del casting, les dijeron que no podían continuar porque habían descubierto el nombre artístico de ella: Cris Baby. Así, de golpe, el chico que le gustaba descubrió que era actriz porno y lo hizo delante del resto de aspirantes al anuncio -el responsable les avisó delante de todos-.

Cris se marchó sin despedirse y apagó el móvil para no enfrentarse a que su compañero supiera ya la manera en la que conseguía el dinero para pagar la academia. Alberto, al no conseguir hablar por teléfono con ella, no dudó en presentarse en su barrio para buscarla. Cuando la encontró en el bar, le confesó sus sentimientos y le explicó que no le daba igual su trabajo, que lo único que importaba era ella.

A partir de ese momento, iniciaron una bonita relación en la que él apoyaba en todo a su novia: la acompañaba a los castings, a hacerse las pruebas exigidas en las películas... Tanto quiso demostrar su amor, que se acabó quemando. Cris empezaba un nuevo rodaje y antes, él quiso ir con ella a ver el plató; fue entonces cuando le dijo que quería estar con ella durante la grabación. Cris le pidió que no se pusiera a prueba, pero él no hizo caso y, cuando ella rodaba una escena con otro hombre, Alberto apareció por sorpresa. Él no pensaba que le iba a afectar tanto, pero no lo soportó y se marchó. Después, ya nada volvió a ser igual. Alberto intenta comportarse con normalidad y continuar con la relación tal y como estaba hasta entonces, pero Cris ya no era capaz. Le quería, pero ya había comprobado que su trabajo le hacía daño y que, tarde o temprano, le pediría que lo dejara, así que optó por dejarlo a él.

A Alberto le duele que le diga que lo hace por él y le demuestra que eso no es así y que quiere estar con ella, pero la decisión ya está tomada.