Gareth Bale pierde el foco de Gales y pasa desapercibido en la concentración: su oportunidad para reivindicarse en la Eurocopa

  • La concentración de gales vive en un eterno anonimato en Bakú

  • Gales pasa desapercibido, pero su objetivo en la Eurocopa 2020 es volver de nuevo a la primera plana de fútbol mundial

Bale ha pasado una temporada con luces y sombras en su año cedido con el Tottenham y ahora tiene la oportunidad de resarcirse con su selección. Gales ha decidido concentrarse en Bakú durante la fase de grupo y será en el estadio de esa ciudad donde dispute los dos primeros encuentros frente a Suiza y Turquía, frente a Italia lo harán en el estadio Olímpico de Roma.

Dentro del combinado galés, la gran estrella es el jugador del Madrid, pero lo cierto es que apenas se habla de él y el foco mediático se ha alejado de él. Gales llegó a las semifinales de la pasada edición de la Eurocopa en su primera participación y extrañamente la selección en general no está captando la atención ni del público ni de la prensa.

Nadie se acerca al hotel de concentración para pedir fotos o autógrafos a Bale. Si preguntas por él en la ciudad muchos de ellos no saben quién es o apenas tienen conocimientos de él. Gales se ha querido llevar la concentración fuera de su país, a pesar de que la mayoría de ellas se han mantenido en sus sedes y no notan el calor del público. Veremos si cuando eche a rodar el balón en su primer partido frente a Suiza el ambiente cambien y puedan sentir el aliento del público.

Gareth Bale quiere resarcirse

El jugador blanco quiere dar un puñetazo encima de la mesa tras su temporada con altibajos. La llegada de Carlo Ancelotti al Madrid supondrá una nueva oportunidad para él ya que de su primera etapa guarda muy buen recuerdo con el italiano.

La Eurocopa comienza con incógnitas respecto a su futuro. Como reconoció Jonathan Barnett, su representante, todo está pendiente de un diálogo a tres bandas, entre la parte del jugador, los Spurs y el Real Madrid, con el que le queda un año más de contrato pero donde ve difícil que tenga hueco.

Pese a que su calidad sigue siendo incuestionable, su estancia en Londres no ha relanzado la figura de un futbolista que llegó a ser considerado uno de los mejores del mundo y a ser uno de los mejor pagados. Sus problemas físicos no han desaparecido del todo y el técnico luso Jose Mourinho, hasta que fue destituido, tampoco le ofreció la titularidad indiscutible.

De hecho, en esta última temporada ha participado tan solo en 30 partidos entre todas las competiciones -17 como titular-, en los que ha marcado catorce goles, con dobletes ante Burnley, Crystal Palace y Leicester, y un triplete al Sheffield Wednesday el 2 de mayo.

Al margen de estas estadísticas personales, Bale, que cumplirá 32 años el 16 de julio, no ha sido nada trascendente para un equipo como el londinense necesitado de su aportación y que ha quedado lejos de los objetivos marcados al principio de temporada.

Por eso, y mientras se resuelve su futuro, esta Eurocopa 2020, aplazada a 2021 por la pandemia de la covid-19 se presenta para el 'expreso de Cardiff' como la mejor oportunidad para reivindicar su figura donde más a gusto está, en su selección. Solo con llegar a la concentración se le ilumina la mirada y aparece una sonrisa eterna.