Descubrimos a Marte y todos sus habitantes un 8 de septiembre de 1997. Con la idea (superada después con creces) de sorprender todos los días se presentaron capitaneados por Javier Sardà una panda de marcianos locos que hicieron de lo irreverente un estilo de vida. Fue verdad que su atrevimiento nos quitó el sueño y regaló grandes momentos televisivos, pero lo que podemos poner en duda es que todo aquel show revolucionario no se hiciera realmente en Marte tal y como estaba previsto. E aquí los verdaderos motivos de por qué 'Crónicas Marcianas' parecía de otro planeta:
El perdón inaugural de Javier Sardà
El primer síntoma que levantó expectación y que era un signo clave de que la conexión que se hacía de 'Crónicas Marcianas' era de Marte y no de la Tierra fue la disculpa por adelantado de Javier Sardà. Sí, el presentador nada más atravesar el plató lanzó un speech de lo más emocionante en el que no dudó en pedir perdón por adelantado a la audiencia por los estragos que causaría aquella civilización a la hora de abordar las noticias que se cocerían en la Tierra.
La marcianada de Boris: La costumbre de hacer el hombre desnudo
Llegó a Marte para escandalizar y se quedó con el cariño del público a base de desnudos. Boris Izaguirre estuvo al lado de Sardà en 'Crónicas Marcianas' y nos ofreció la primera oportunidad para normalizar la homosexualidad en España. Desacomplejado y excesivo convirtió las bajadas de pantalones en algo de lo más característico que no podían faltar casi nunca en ninguna noche de 'Crónicas Marcianas'.
Las múltiples personalidades de Carlos Latre
Carlos Latre llegó solo a Marte en 2001 y salió de allí en 2005 convertido en un claro caso de personalidad múltiple. Sus imitaciones le dieron un hueco de honor para conducir las noches de 'Crónicas Marcianas' con Javier Sardá y Boris Izaguirre. Un fichaje de lo más rentable y paranormal porque siendo uno al final arrastraba a cientos de personajes. Políticos, artistas y famosos… ¡no había famoso que se le resistiese!
Situaciones extremas: La serpiente que mordió a Sonia Monroy y otras perlas
En el hacer de 'Crónicas Marcianas' se atrevían con todo. Nos podía parecer una locura o de venir realmente de otro planeta, pero el mérito del programa estaba en hacer precisamente lo que les diera la gana, eso sí con un guion de fondo. Y con la intención de llevar el entretenimiento a su máxima potencia no dudaron en meter un día a Sonia Monroy en biquini en una urna de cristal y de cubrirla con serpientes que se le enroscaron en todas sus partes. Los pobres reptiles aturullados de tantas curvas abruptas acabaron mordiendo el cachete del culo de la catalana y esta abandonó el plató bien enfadada entre aplausos del público. ¡De lo más delirante!
El humor de Paz Padilla
Solo estuvo dos años al lado de Sardà en 'Crónicas Marcianas', pero eso le valió ya de entrenamiento de por vida. Paz Padilla se hizo en aquel planeta con una larga lista de imitaciones y parodias que catapultaron por todo lo alto su carrera. Tanto mérito tenía lo que sucedía en Marte que hasta la presentadora ahora de 'Sálvame' logró que Ricky Martin cayese en los brazos de aquella particular 'teacher' de inglés.
Hornada de grandes personajes
'Crónicas Marcianas' se convirtió en la voz de numerosas historias, culebrones y enfrentamientos de lo más surrealistas que mezclaban información del corazón, realities, música pop y personajes del vodevil más decadente. La Pantoja de Puerto Rico, Pozi, la inexperta becaria Bea, Galindo, Mariano Mariano, y toda la troupe que nació en torno a Tamara/ Ámbar/ Yurena fueron vitales para que pasase de todo en directo y para sentir cariño por aquellos grandes personajes que eran como unos extraterrestres de lo más amigables.