Del "macarroncia", al "guantazo": la guerra entre Oriana y Lola Ortiz estalló en 'MyH'

Después de abandonar el trono de ‘MyHyV’, Oriana Marzoli regresó al programa en verano de 2013 para convertirse en pretendienta de su ex, Tony Spina, y así retomar la historia de amor a la que habían decidido poner punto y final algunas semanas antes.

En su regreso, la ahora concursante de ‘La Casa Fuerte’ entró al plató del dating show más longevo de Mediaset arrasando con todo y ya en su primer día protagonizó una gran discusión. Nada más poner un pie en el programa, Oriana Marzoli se fue directa a por Lola Ortiz y no dudó en cantarle las cuarenta.

La reina del ‘PinkiGloss’ llegó haciendo amigas en su vuelta como pretendienta y ya en su primer día no dudó en bautizar a sus rivales como “macarroncias”, dando el título de “Macarroncia número uno” a Lola Ortiz. Pero ¿cuál era el motivo de esa inquina contra ella?

Según Oriana Marzoli, la canaria había utilizado sus redes sociales para hablar mal de ella y poner un comentario de lo más duro: “Ojalá le pudiera dar un guantazo”. Al escuchar la acusación, Lola Ortiz no dudó en defenderse y aseguró que eso no era exactamente lo que puso: “No me acuerdo si lo puse, pero es la verdad, sacas de quicio a cualquiera”, añadió.

Ambas protagonizaron una discusión de lo más fuerte y Oriana tachó a la también pretendienta de Tony Spina de “macarra, ordinaria y barriobajera”, algo que hizo que Lola se revolviera en su asiento: “A mí me respetas”, dijo muy enfadada.

Oriana llegó muy exigente y recordando a Tony Spina que había dejado el trono por él, por lo que aseguraba que se merecía una silla especial, diferente y más cómoda que la del resto de pretendientas. Un privilegio que hizo saltar a las chicas que luchaban por el corazón del ex de Makoke.

Mientras que Oriana le exigía un trato de favor a Tony y él cedía, Lola Ortiz no dudó en levantarse de su asiento y abandonar el plató: “No voy a permitir que ella tengo privilegios y nosotras no”, declaró.

Tony Spina estaba justo en el centro de la polémica y decidió salir a convencer a Lola Ortiz de que no se marchara del programa. La canaria, haciendo gala de su fuerte personalidad, aseguró que “a la mínima” se iba y que no iba a aguantar la actitud de Oriana y los tratos de favor “ni por un tío, ni por nadie”.