María es una mujer realmente valiente. Ella tuvo la mala suerte de encontrarse en la calle con Tomás Pardo, uno de los violadores reincidentes más conocidos de nuestro país. María nos ha explicado que, pese a que en su caso no consiguió violarla, los golpes que recibió la dejaron traumatizada durante años. Meses después, consiguió su objetivo con otra mujer. Uno de los momentos más escalofriantes de la entrevista ha sido cuando nos ha contado que, minutos antes del juicio, el magistrado la metió junto con otra víctima en una sala: "Nos dijo que pensásemos lo que íbamos a hacer, que ese chico tenía cara de bueno y no podía haber hecho algo así".
