Un mensaje anónimo alertaba a la madre del menor de 8 años al que su padre le obligaba a comer sus propias heces: “Se ha autolesionado”

  • El abogado de la madre confirma que la pareja del padre amenazaba al niño: “Le decían que lo iban a difuncir en su colegio”

  • El abogado de la madre narra el momento en el niño se rompe y confiesa el maltrato del padre

  • En el domicilio familiar habría otras dos personas que eran testigos y ni lo impedían ni avisaban a la policía

Las señales y arañazos que un menor presentaba en la cara tras pasar unos días con su padre, dieron la voz de alarma a la mamá quién descubrió que el niño estaba sometido a insultos, vejaciones e incluso, su padre le obligaba a comerse sus propias heces mientras que la pareja del mismo lo grababa todo y le amenazaba con difundirlo en el colegio y en las redes sociales.

Las autoridades ya están estudiando el caso de un menor que está completamente atemorizado. Al parecer no es un suceso aislado y el pequeño de 8 años de Oviedo llevaría años sufriendo agresiones por parte del padre, llegándole a hacer sangrar por la nariz en varias ocasiones.

Manuel Belinchón, abogado de la madre ha solicitado que se suspenda el régimen de visitas y ha conectado en directo con ‘Ya es mediodía’ para contarnos la última hora sobre el caso. La ley establece que en casos en los que el menor esté en riesgo se suspendan las visitas y el próximo día 28 un equipo psicosocial le hará un estudio.

Según ha explicado que abogado, el niño llegó hace un mes aproximadamente con lesiones y el contó lo sucedido a su madre. Además, un mensaje de una de las personas que viven en la casa del padre, le pedía a la madre que no se preocupara porque el niño se había autolesionado, pero “objetivamente, las lesiones que tiene el menor es imposible que se las haya hecho él mismo”.

El niño asegura que las lesiones han sido producidas por dos personas “tenemos que intentar acreditar quiénes han sido esas dos personas y qué lesiones y qué tipo delictivo ha cometido cada uno”. Además, el letrado Manuel Belinchón ha explicado que en la vivienda hay otras dos personas que eran testigos y ni lo impedían ni avisaban a la policía.

El abogado ha confirmado que según la versión del menor, la pareja de su padre era quién le grababa mientras le obligaban a comerse sus propias heces y le amenazaban con difundir el contenido en su colegio y subirlo a las redes sociales.