Después de que confirmara que el incidente de la comisaría de Cornellá se trata ya como un atentado terrorista, 'Ya es mediodía' ha podido hablar con una vecina del edifico donde el argelino abatido vivía con su mujer, Lucía, y con las dos hijas de ella de un matrimonio anterior. Conchi García asegura que no había notado en eél ningún indicio de radicalidad religiosa.