Tras la calurosa bienvenida que le han brindado sus seres más queridos (incluso su esposa Olga, que procura mantenerse alejada de las cámaras), Antonio David ha aprovechado su entrevista en plató para desenmascarar a algunos de sus compañeros.
Ha recordado su polémica con el jamón, y ha confesado que no contó toda la verdad en su momento y que sabe que esto le perjudicó, convirtiéndose en el expulsado de la semana. Ahora que ya está fuera del concurso ha querido contarle a Jorge Javier toda la información que escondía y que no quiso desvelar en su día.
Antonio David sabía que ‘El Dioni’ escondía un paquete de tabaco, el cual había conseguido cuando fue detenido por la Guardia Civil y llevado al cuartel: “Los agentes le dejaron fumarse un par de cigarrillos durante su confesión y después le dieron un paquete de tabaco, que él se llevo hasta la finca”.
Pero eso no era todo. También conocía la localización de una mina de alimentos que se ocultaba en las inmediaciones de la granja. Ha animado al equipo a llevar al ‘Dioni’ hasta allí, hacerle excavar en un lugar preciso. Bajo la tierra han comenzado a aparecer paquetes de arroz, camisetas y envoltorios de alimentos que habían sido consumidos previamente.
Aunque todos los ‘acorralados’ han asegurado que desconocían la existencia de ese sabroso motín, sin embargo Antonio David ha insistido en que para Reche, la despensa subterránea, no era del todo un misterio.
Finalmente, el destronado, ha reconocido que la reserva alimenticia era de su propiedad, algo por lo que la organización ha decidido castigarle con la nominación automática. Pero la amonestación ha terminado salpicando a todos los habitantes de la granja: a partir de ahora, nadie podrá acceder a los terrenos que hay más allá de la letrina.