Tener que confesar que su relación sentimental con Aída fracasó y aclarar la condición sexual de su hijo Fidel constituyen los principales temores de Chema ante la inminente llegada de sus padres a Esperanza Sur. Como en ningún momento informó a sus progenitores sobre estas cuestiones, el tendero se angustia pensando en la decepción que se llevarán cuando descubran sus secretos.
Cansado de su precariedad laboral en el Reinols, Machupichu exige a Mauricio que le haga un contrato. Ante la negativa del dueño del bar, el camarero decide buscar un empleo mejor. Poco después del cese de la labor del profesional sudamericano, la gestión del local es un auténtico desastre. Tras descubrir que en el fondo echa de menos a Machupichu, Mauricio decide hacer todo lo posible para que regrese su empleado.