La Corona de Pelayo... a fuego lento

Mayte Méndez de Vigo 19/01/2016 14:46

Días atrás, cuando Pelayo me comentó que quería una Corona (como buen Príncipe que es), pensé en el Joyero Isidoro Hernández, 4 veces Premio Vogue Joyas, excelente profesional, magnífico artista y mejor persona para encargarle ese complemento tan especial para la última noche del año. Después de quedar fascinados con sus bocetos iniciales al más puro estilo Leyenda de Caballeros, de Juego de Tronos y Rey Arturo, quedamos en su deliciosa tienda de la calle Claudio Coello 38 de Madrid.

Los dibujos entusiasmaron a Pelayo, que tras valorar todas las opciones, y probarse alguna corona en cartulina, tuvo muy claro cuál sería su diseño final con cuarzos, cuarzos limón, amatistas, turquesas y perlas barrocas…

Con muchísimas horas de trabajo en vista para la realización de la Corona, dejamos a Isidoro que bañara en oro, recortara, estirara y limara la plata, hasta dar con la forma del diseño que queríamos. Fue un proceso totalmente artesanal, hecho a mano como sí se tratase de una Corona Real, tal y como se merecía nuestro Príncipe!

Cuando pedí a Isidoro que me contara como había sido la experiencia, me lo relató de una manera tan real y divertida, que no he dudado en copiarlo tal cual me lo escribió: “Nunca Imaginé que podría coronar a un Príncipe, uno moderno, con tupé, una blanca sonrisa, miles de seguidores y una capa de tatuajes alrededor de su cuerpo, menos aún con el color rojo en su ropa interior pero…así es la vida de divertida y de sorprendente!”

…“Folios y folios llenos de garabatos y bocetos…finalmente dimos con la idea, el propio Pelayo participó en el asunto, como Príncipe de ideas muy claras y muy seguro en sus decisiones. “Quiero algo nada discreto y me muero por las piedras” dijo, a partir de estas palabras fueron horas y horas de trabajo...”

…“Hilos de oro fueron tomando forma alrededor de las piedras, una guirnalda de corazones las elevaba para conseguir la altura deseada por Pelayo. Todo un proceso realizado a mano, a base de recorte de metal y golpe de lima. Con mucha precisión engastamos todas esas piedras semipreciosas, talladas a dos caras con motivos vegetales, que guardaba desde hace años para una gran ocasión… y qué ocasión! Casi sin darnos cuenta, la historia de mi corona iba llegando al final".

…“El gran día fue tremendo, brillaba perfecta, encajaba perfecta, nadie como él podía lucirla mejor, visualmente la hizo parecer ligera y altiva”.

…“Era para la noche más especial del año… y yo cambié las palabras del cuento Colorín Colorado este cuento se ha acabado, por Feliz Año Nuevo! ¡Fue perfecto!”

Esta ha sido la historia de la Corona, una Corona muy especial que se hizo realidad gracias a Isidoro Hernández. Desde este rincón le doy las gracias por confiar en Pelayo, en mí, y por supuesto, en Mediaset. Isidoro, siempre es un placer trabajar contigo. ¡Gracias!

*Fitting en el taller de David Delfín. www.davidelfin.com

*Mi selfie con el Príncipe ( I´m so sorry :) )

Recuerda que responderé a tus preguntas la última semana del mes.