Si no se siguiera el orden lógico de las cosas anoche Niedziela hubiera dormido en la casa de Guadalix. Quiero decir que si la entrevista con Mercedes hubiera sido antes de la expulsión no veo a la audiencia votante capaz de permitir que se quedase sin vivir el día 101. Porque Nied convirtió la falsa final en un programa divertido gracias a su buen humor, su inocencia y ese positivismo exagerado que tanto la caracteriza. ¿Era necesaria esta semifinal? Vista la entrevista no solo necesaria sino imprescindible. Hubiera sido una pena que la entrevista a Nied hubiera quedado reducida a una faena de aliño dentro de una final en la que los protagonistas habrán de ser otros.
Tampoco veo tanta crueldad en hacerles creer que saldrían todos anoche y tengan que esperar un día más para conocer quién se lleva el maletín. Peor fue lo de GH 12+1 y su falsa final. Aquello sí que pudo ser traumático. El día de hoy transcurrirá con tanto silencio como el de ayer, con los dos aspirantes a poner su nombre en el palmarés de ganadores preocupados por su imagen y poco más. Aunque Sofía llegó a temerse que no sería la final ayer y así lo dijo. Intuitiva hasta el final.
Tras la salida de Marta hace un par de jueves, Nied es la segunda ‘embrujada’ que deja un gran vacío en esa casa. El sueño de verlas a las tres en la final se desvaneció anoche. Que fuera la crónica de una salida anunciada no quita para que lo lamente igualmente. Solo la ‘embrujada’ Sofía permanecerá en la casa hasta el final, y espero que sea la última en salir porque eso querrá decir que el maletín se lo lleva una de ellas.
La diferencia entre Sofía y Aritz como concursantes es la misma que entre el día y la noche. En la gala de ayer lo vimos bien cuando cada uno respondía en el ‘confe’ a las sucesivas preguntas sobre todos los que han sido sus compañeros de encierro. Sofía hablaba bien de quien debe hacerlo, con palabras cariñosas para Marta y Nied, además de recordar cosas positivas de Han o Ricky. Sobre el resto dio su opinión sincera, más o menos crítica.
Desconfío de quien habla bien de todo el mundo tanto como aquel al que nunca he escuchado decir nada bueno de nadie. No me creo a quien dice llevarse bien con todo el mundo y va pregonando amor por todos sus congéneres. Es otra de las cosas que me separa de Aritz, quien en su vídeo de presentación nos intentó vender que es una persona “tranquila y pachorra” cuando hemos visto otra cosa bien distinta en estos tres meses.
Imposible que el del sombrero no se haga cargo de lo dicho anoche por Mercedes Milá, acertadísima al expresar su sorpresa por el hecho de que Aritz solo tuviera buenas palabras para sus compañeros. A él mismo le resultó intolerable que Suso defendiera a Han en una gala, reaccionando con energía al responder: “Y una puta mierda un niño inocente”. Suso era malo por hablar bien de su amigo Han porque en ese momento le parecía “un perfecto manipulador psicológico” y “un enfermo” al que fuera de esa casa le “cascaría un tortazo”.
Es revelador que Aritz dijera a su mejor amigo en el concurso (su “gran hermano”) todas esas cosas, además de “hijo de la gran puta”, “bocazas”, “teatrero”, “marica mala” o “puta asiática”. Si eso dijo a su mejor amigo normal que a algunos nos deje ojipláticos con esa versión edulcorada, rebosante de mantequilla y mermelada, sobre cómo ve al resto de excompañeros. No es creíble que no tenga ni una palabra crítica para alguno de ellos, particularmente con los que tuvo menos relación.
Sin embargo, Sofía se sincera y dice lo que piensa de verdad sobre cada uno de ellos. Estas son las cosas que me hacen querer ver a Sofía ganadora. Ese vídeo con sus auténticas opiniones, expresadas a braga quitada y sin temor alguno, bien merece un maletín. El contraste con su oponente es tan importante que hasta ofende pensar en otra opción. La decisión está entre una concursante que responde con total y absoluta sinceridad frente a otro que maquilla la realidad y no solo controla al máximo lo que él dice sino que también pretendió controlar lo que podía o debía contar Han.
Como bien aclaró Marta, no procede decir que Sofía dice todo eso en el ‘confe’ y no directamente. Primero porque a quien se quejaba la llamó “patética” a la cara. Si no fuera porque ahora todos los reventados de la fila cero parecen defensores de que se digan las cosas, estarían criticando que no se hubiera guardado esas palabras porque no hace falta ofender de esa manera. Tengo dicho que no iríamos a ningún lado si dijéramos a todos los que nos rodean las cosas malas que pensamos de ellos.
Todavía espero que nos cuenten esos que critican a Sofía por no haber dicho todo a la cara la razón por la que tienen tan mala opinión sobre ella, pero nunca se lo dijeron. El lado estrecho del embudo siempre debe ser para los demás, por lo visto. Igual que anoche Ivy diciendo “gorda” a Marta, pero luego parecía escandalizada porque esta respondía llamándola “renacuajo”. Están mal ambas cosas, aunque puestos a escoger prefiero a Marta, que al menos lo dice abiertamente y no a media voz, así como disimulando.
Sofía no solo analiza críticamente a los demás, también hace lo mismo sobre ella misma. No he conocido concursante con tanta capacidad de autocrítica. Y sin esperar para ello al momento de rendir cuentas de su paso por el programa sino mucho antes. Lo vimos anoche cuando reconocía abiertamente ser muy envidiosa. “Como no gane me va a dar mucha envidia. Yo lo quiero todo”, decía. Es autocrítica e inconformista, cosas muy unidas una a la otra. Lo normal con su edad, aunque sea más común manifestar lo segundo que lo primero.
Tras la salida de Nied hubo un momento para recuperar los cara a cara del pasado jueves. Esta vez con los dos finalistas en sillones enfrentados, viendo vídeos poco agradables para ambos. Entonces todavía no sabían que habrían de pasar un día más en esa casa. Estoy con Aritz en que la cosa no fue para tanto. Lo que vieron anoche podían imaginarlo o sencillamente ya son nudos desatados hace tiempo. Aritz disimulaba haciendo ver que no le importaba nada que Sofía dijera que lo sabe todo de su relación con Han, lo cual contrasta con sus denodados esfuerzos por conseguir que el chino no se fuera de la lengua.
Dice el del sombrero que ha hecho lo que ha querido y no le importa que Sofía lo sepa todo, pero eso no pareció siempre así. Es posible que al final haya asumido lo complicado que es mantener secretos ahí dentro y tenga claro que su “persona de fuera” ya sabe todo con pelos y señales. Aunque mejor quitar lo de los pelos, que puede ser malinterpretado. Mucho más clara fue Nied en la entrevista. “Me ha dicho hoy que Han le tocaba el vello púbico y no sentía nada, solamente cosquillas, pero yo sé que ha habido algo más que tocar el vello púbico”, decía Nied. Y cuando Mercedes preguntaba si habían hecho “el acto” lo negaba, porque Han les dijo que no. No veo la diferencia entre Sofía y Nied en esto.
Las dos han estado viviendo en esa casa, ajenas durante algún tiempo a lo que sucedía bajo las sábanas. Es relativo que no sea cosa suya, porque todos tenemos ojos y oídos. Me es indiferente lo que haga quien sea en la cama, igual que su sexualidad, pero esa forma de dosificar la información me hace ver que una cosa y otra están siendo utilizadas en el juego. Además de la poca coherencia de apelar de forma permanente a la “persona de fuera”. Laura Campos (GH 12) fue al ‘confe’ y dijo: “Esto es lo que hay”. Mucho más honesto que el juego a dos bandas de Aritz. Y esto no solamente se ha visto aquí fuera, también lo vieron dentro. Por eso no me extraña lo más mínimo que Sofía insistiese anoche con gesto picarón en que lo sabe todo. “Han no es un mentiroso”, respondía Aritz. Pues precisamente por eso.
El cara a cara de anoche entre los dos finalistas fue tan poco útil como los del jueves pasado, dejando un poco sensación de fracaso. Al menos en este caso no fue la cosa tan desagradable como entonces, con Maite exaltada y Suso obsesionado por conocer detalles intrascendentes sobre Aritz, como el tiempo que dura teniendo sexo o su definición sexual. Ni siendo eyaculador precoz y teniendo dudas sobre su opción sexual se justificaría ese interés morboso. Por otra parte, curioso que a Aritz le preocupe tanto que le pongan etiquetas y hagan juicios sobre su relación con Han cuando él calificó a Sofía como ‘tamagotchi’ por arrimarse a los tíos y la nominó repetidamente por su relación con ellos.
Y finalmente llegó la entrevista a Niedziela. Me atrevo a decir que fue la gran entrevista de esta edición. Salió la Niedziela más gamberra, divertida e inocente. Una persona muy especial que ha merecido ese tercer puesto que ayer le puso en bandeja la fenomenal entrevista que le hizo Mercedes Milá. Con buen humor y toda la retranca del mundo, Mercedes supo sacarle el jugo a esa Nied cantante, enamorada de Fernando Alonso y sorprendentemente pacata en un mundo que parece invitar a lo contrario, como es el del circo. Se desquitó Mercedes tras la correosa y casi imposible entrevista a Han el pasado jueves.
Maravillosa Nied cantando cada vez que se lo pedían, manteniendo esa dulce ilusión por ir a Eurovisión. A pesar de lo insólito que resulta, me transmite una ternura inmensa ver los ojos de Nied brillar y su ilusión por poder cantar en medio del plató de Gran Hermano. Es tanto su entusiasmo que no le valió que Mercedes intentase bajarla a tierra firme, evitando engañarla en todo momento. “Sabes que nunca te hubieran cogido en ‘La Voz’, ¿no?”, le decía sin circunloquios de ningún tipo, pero ni por esas. No sé si ha nacido el ingeniero de sonido capaz de hacer sonar eso medio bien. Aun así, digo lo mismo que aquel día Marta, cogiendo entre sus manos el rostro de Niedziela: si tú crees que puedes ir a Eurovisión yo también me lo creo.
Lo mejor de Nied es que a pesar de haber sido una concursante blanca, sin apenas conflictos y ni una sola discusión importante en sus 100 días de encierro, se parece a Sofía en que dice las cosas tal y como las piensa. Su filtro es pura delicadeza, porque no le gusta ofender o molestar a los demás. Poco más que eso, y lo demostraba anoche hablando con claridad de su “no relación” con Vera. No le hizo nunca tilín, así de claro. No quita para que ambos se tengan un inmenso cariño, pero esto es así. Y Nied no tuvo inconveniente para expresarlo con claridad.
Lo mismo pasó con Ricky, a pesar de que en el vídeo que vimos solo se veía la parte buena, esa en la que ella parecía abierta a pensar en tener algo. En la realidad hubo un par de fases más. Aquella en la que a Nied le molestó que fuera tan directo y poco respetuoso y otra más en la que volvieron a tener una buena relación, porque con ella es casi imposible llevarse mal. Recordando cuando le preguntaba por su actitud en el acto decía: “Pensé, qué atrevido”. Esa es Nied. Capaz de hablar con naturalidad de las cosas, sin sonrojarse por nada (bueno, solo un poquito) y orgullosa de tener esa parte mojigata que en ella resulta tan graciosa. Me da la impresión de que cuando habla de dos semanas para hacer el acto, y luego matiza que igual un poco más, en realidad está pensando en dos meses. O a saber.
Hemos perdido una gran concursante, a la que prestamos mucho menos atención de la que merecía por culpa de su “no relación” con Vera. Menos mal que no la hemos perdido hasta el penúltimo día. Y que antes de esto la hemos podido disfrutar bien durante las últimas semanas de concurso. Nied merecía una entrevista en condiciones y la tuvo anoche. La mejor entrevista de la temporada, ya digo. Sé que es imposible, pero repito con lo mismo que empecé, si hubiera empezado la cosa con la entrevista igual hubiera sido Niedziela la ganadora.
Moleskine del gato
Así las cosas, solo falta saber si quien se lleve esta noche el maletín tendrá un porcentaje mayor o menor que el 70,9 % de Paula el pasado año. Haciendo la misma operación aritmética del otro día, los porcentajes quedan así de forma automática una vez eliminado el porcentaje de Nied: 62,7 % frente a 37,3 %. Esto no es nada más que matemáticas. Luego hay que ver lo que pasa cuando se le sumen los votos que han seguido contabilizándose desde anoche y hasta que esta noche se cierren definitivamente los teléfonos.
Personalmente apuesto a que el porcentaje ganador será algo menor que el del año pasado, aunque posiblemente se quede bastante cerca. La pregunta clave, que me repiten una y otra vez en todos los foros, es a quién corresponde el porcentaje mayor. Si tuviéramos eso claro la gala final de esta noche tendría un poco menos de interés. Hasta el último momento me quedará la duda de si mezclo deseo y realidad, porque este gato es hoy más sofista que nunca.
Esta noche tenemos otra fiesta, de nuevo de la mano de nuestra querida Mercedes. No diré jamás que es la última fiesta. Cuando algunos me preguntaban anoche por el último secreto pensaba en eso típico que decimos en Madrid sobre tomar la penúltima. Nunca la última. Por eso es posible que no haya último secreto, pero si lo hubiera voto porque Mercedes nos anuncie esta noche que presentará Gran Hermano 17 el año entrante. No imagino mejor regalo de Reyes.