Carlos cree que Alejandro no termina de definirse

telecinco.es 24/02/2016 09:52

Las cosas cambian con mucha rapidez en la casa más famosa de Guadalix de la Sierra. Ayer amanecimos sabiendo que Laura quería conseguir la nominación directa para Rappel, mientras que este se negaba a tirar las cartas a la hija de Kiko Matamoros. Además, todo parecía indicar que Rosa quería darle sus tres puntos a Laura, a quien el ‘clan del visillo’ criticaba sin ambages. El equilibrio de fuerzas había cambiado, según lo visto. Los antiguos aliados de Laura estaban ahora en su contra, mientras que ella parecía hacer mejores migas con Carlos que con Rappel y compañía. Sin embargo, el día terminaba con Rappel echando las cartas a Laura mientras esta volvía a expresar su intención de darle sus tres puntos a Carlos. ¿Podrían parar de tanto cambio alguna vez?

Belén y Charlotte, que siguen en la casa aunque no lo parezca, llevan días lanzando todo tipo de invectivas contra Rosa y Raquel, sin salir de sus dos únicos argumentos, convertidos en bucles aburridos por tanta repetición. Los dos argumentos de las ‘cuñis’ son que no hay hombres en la casa capaces de saciar sus necesidades y que nadie las tiene en cuenta por lo cual han decidido ir por libre, no colaborando en nada que vaya en beneficio del grupo. Hubiera asegurado que estas dos concursantes se iban a tirar los puntos a la cara mutuamente con el ‘clan del visillo’, pero anoche también Belén sorprendía con la intención de emplear la nominación directa para poner en la palestra a Carlos.

Las intenciones nominatorias son tan efímeras y están al albur de cualquier pequeño detalle que pocos minutos después de contar que reservaba para Carlos esa importante nominación cambiaba de idea a causa de una ventosidad de Sema. Sí, amigos, un pedo puede cambiar toda una nominación directa. Sema no tuvo el buen detalle de apartarse de Belén en el momento clave y eso le puso a media casa en contra. O es por fas o por nefas. Ahí te la tienen jurada a la mínima. Carlos puede librarse por un pedo de Sema. Si gracias a esto Sema entra en la terna de nominados bienvenidos sean los gases del amigo de Chabelita. Por lo visto anoche, es muy probable que Sema quedase nominado en este caso junto a Carlos y Alejandro. Así es que nunca lo tendremos más a tiro.

Belén fue anoche correa de transmisión entre un enojado Alejandro, que criticaba sin piedad a Carlos, y el grupo que por las noches se concentra en torno a Rappel. El adivino estaba especialmente alterado, cargando contra Carlos sin razón aparente. De nuevo volvía a recordar cuitas de días pasados, entre otras la de los motes. Sigue sin enterarse de que no le llaman ‘míster Robin’, su videncia no conoce de motes. Anoche el brote de Rappel dejó de hacerme gracia por dos razones. Primero porque el tono era más áspero y desagradable que en ocasiones anteriores. Tanta amargura no es fácilmente digerible. Y segundo porque tuvo la desfachatez de meter a una menor de once años en su rabiosa crítica hacia Carlos.

Cuando Laura contaba a Rappel que a ella la llama ‘niña del exorcista’, decía Rappel: “Se lo pones a tu hija eso de la niña del exorcista”. Hay que tener muy mala sangre para decir una cosa así. Es la segunda vez que en esa casa se ataca a Carlos poniendo a su hija de por medio. La vez anterior fue Rosa hace una semana, y anoche esto de Rappel. Mi estómago no está hecho para aguantar estas cosas tan repulsivas. Solo por esto deseo con más fuerza de lo que sería deseable que mañana sea Rosa la expulsada y que Rappel salga pronto para volver a complacer a papanatas candorosos capaces de creer lo inconcebible.

Mi maltratado estómago da un vuelco cada vez que alguien derrama su bilis mencionando a una menor, hija de un concursante. Igual que da otro vuelco cuando escucho a Belén recordar eso que le sucedió hace siete meses. ¿Es necesario que lo recuerde a cada rato? Me tiene muy revuelto el uso que hace esta concursante de un drama personal, que menciona de forma tan sutil como interesada. Siento decir esto con tanta crudeza, pero llevo demasiados días intentando evitar el tema, y ya no aguanto más.

No contento con mentar a una menor, Rappel amenazaba anoche con fastidiarle la vida a Carlos. “Le puedo decir dos cosas que lo dejo seco”, decía Rappel, y añadía: “Le echo una sentencia que le jodo su vida”. Al lado de tanta iniquidad lo dicho por Carlos a Alejandro casi me parece una regañina sin demasiada importancia. Carlos me pareció injusto todo el día de ayer con Alejandro, no solo durante el Límite. No debería desaprovechar la ocasión de tener un aliado en la casa. Hacer ese camino solo es muy duro, incluso para alguien que domina la situación siempre, como es Carlos. Alejandro se equivocó al decir que no le interesaba nadie en la casa, incluyendo a Carlos. Por la noche intentaba convencerle de que él no entraba, pero no lo pareció así. Durante la discusión de la noche Alejandro rechazaba los consejos de Carlos, otro motivo para que este se reafirmase en todo lo dicho.

Por lo que he podido ver en Carlos este mes y medio largo me parece que actúa movido por impulsos, sin estar condicionado por su propia conveniencia en el juego. No obstante, está claro que le ha influido lo que se ha podido filtrar de Alejandro desde fuera de la casa. Normal que tenga en cuenta el hecho de que los expulsados o no se hayan dirigido a él o lo hayan hecho con reproches sobre su comportamiento poco sincero y desleal. Pensemos por un momento que se está desmarcando de Alejandro al ver que Javier le agradece irónicamente su falsa amistad y Liz sugiere que no quiere saber nada de él fuera más allá de una relación por WhatsApp. ¿Podemos llamar a Carlos interesado? Si se moviera por estas señales sería razonable.

Creo que Carlos ha cambiado con Alejandro por las razones señaladas y también por otras. La desidia del míster ha ido en aumento, teniendo su momento álgido tras la nominación de la audiencia el jueves pasado. Se pasó un día entero diciendo que quería marcharse, lo cual fue utilizado anoche por otras personas en su contra. Julius le hizo contraalegato y tuvo en cuenta esas pocas ganas de estar ahí. También lo mencionó Belén, que se posicionó para que fuera Alejandro expulsado mañana. Carlos ha dado buenos consejos a Alejandro para que no mostrase una debilidad tan fácilmente aprovechable por sus enemigos. Pero Alejandro no quiere sus consejos.

Entiendo los motivos de Carlos y también la decepción de Alejandro. Creo que le sobró animosidad a Carlos ayer. Pudo haber dicho lo mismo de forma menos hiriente y, sobre todo, no haberse posicionado en contra de Rosa de forma que más parecía tener ganas de que fuera expulsado Alejandro. En eso creo que se equivocó de medio a medio. Carlos lleva haciendo un concurso fantástico, ilusionando a muchos seguidores del programa al reunir algunas de las condiciones que reconocemos en los mejores concursantes que han pasado por esa casa. No podía ser todo un camino de rosas. Alguna vez tendría que equivocarse. Ha perdido la perspectiva y la ha cagado. Lo cual no quiere decir que haya tirado por la borda todo lo conseguido en estas siete semanas. Otra cosa es la reacción desproporcionada de Alejandro anoche, que viene a dar la razón en parte a Carlos.

Tal fue el enfado de Alejandro anoche que pilló a Belén por banda e hizo un despiece salvaje de su amigo. Esas son las cosas que hacen desconfiar de este concursante. Solo es fiel a sí mismo, algo de lo cual no nos hemos dado cuenta solamente nosotros. El despiece de Alejandro a Carlos fue inmediatamente transmitido por Belén a los inveterados enemigos de ambos concursantes. Es como dar cerillas a un pirómano. Dinamita suficiente para hacer entrar en brote a Rappel mil veces más. Carlos le reprochaba a Alejandro falta de definición, lo cual es inconcebible a estas alturas. De hecho, le he visto estos dos últimos días muy pegado a las ‘cuñis’. Pues bien, anoche el míster lo confirmó con creces. Sigue sin saber dónde está ni quién es su auténtico enemigo. Carlos se equivocó y vino Alejandro después a hacerle bueno con su torpe venganza.

A estas horas el dormitorio de los pájaros sabe perfectamente de la brecha abierta entre Carlos y Alejandro y van a aprovechar esa información hasta la extenuación. El vuelco que volvió a producirse anoche demuestra hasta qué punto esta situación ha hecho fuerte al ‘clan del visillo’, de repente aliados a las ‘cuñis’. También pudimos comprobar la falta de pudor de algunos, como es el caso de una Laura capaz de meter sus argumentos en la lavadora para sacarlos radicalmente cambiados tras unos cuantos centrifugados. Sin ruborizarse lo más mínimo, pasó de “no confío en Rappel, le quiero nominar directamente” a volver a abrazar al enemigo, pidiendo una tirada más para saber lo que piensa su hermano Diego. ¡Alucinante!

Se disputaron ya los dos privilegios que faltaban en la app de la prueba. Uno es discutible como privilegio y consiste en no nominar. Laura no lo quiso y se lo llevó Julián. Estaba puesto para generar conflicto por la disputa de un privilegio que niega la principal arma en manos de un concursante, que es la nominación, pero Julián evitó cualquier discusión sobre ello renunciando a nominar. El otro sí es un gran privilegio y consiste en nominar directamente a un compañero. Ya he adelantado antes que lo logró Belén y sus dudas sobre qué hacer mañana. Fue el final de la prueba, que superaron con creces al no haber querido apenas consumir batería para algo tan básico como sentarse, aunque a algunos les consintieron que se recostaran en el respaldo del sofá o cosas así, traspasando lo razonable.

Todos contentos con haber superado la prueba salvo Alejandro, víctima de una monumental injusticia. Cuando el domingo se activó el privilegio de la inmunidad la batería no era suficiente para el consumo del 80 % que esta app requería. El tiempo para activar esa app era limitado a 90 segundos, por lo que el ‘súper’ conminaba a Alejandro para que pulsase. El concursante no quería hacerlo porque en el enunciado de la prueba decía que no era posible comprar una app sin suficiente carga de batería. Ante las indicaciones del ‘súper’, Alejandro pulsó y la batería se quedó a menos 2 %. Es claramente una irregularidad, que el lunes pasado mencioné descartando ninguna consecuencia porque el fallo no fue de ningún concursante sino del ‘súper’.

Anoche quedó anulado el privilegio de la inmunidad después de que Julián se enterase de lo sucedido, que no presenció al estar enfermo, y alertase de lo irregular de la situación. Sema quiso ir inmediatamente a denunciarlo al ‘confe’, aunque antes quiso buscar el papel con el enunciado de la prueba. Julián se adelantó a ir al ‘confe’ por otra cuestión. Al volver, Sema y Laura le preguntaron si lo había preguntado. Al ver que Julián no quería entrar en ello, Sema fue al ‘confe’ para denunciar la situación. La denuncia de Sema fue clave para la anulación de ese privilegio.

La culpa de la irregularidad es del programa, que activó una app para la cual hacía falta un 80 % de batería sin que esta alcanzase esa carga ni hubiese tiempo material de llegar en los 90 segundos disponibles. No se entiende la maniobra. Si no querían dar inmunidad bastaba con no ponerla. Si la ponen será para que alguien lo consiga. Si se consigue irregularmente deberían haber alertado de ello sin que hiciera falta la denuncia de un concursante. Es una sucesión de sinsentidos bastante sorprendente.

La conclusión de todo esto es que hubo unos concursantes (Julián, Sema y Laura) maniobrando conjuntamente para quitar a un compañero el privilegio de la inmunidad que había conseguido. Y anoche, varios concursantes celebraban entre risas de satisfacción la injusticia de la anulación de este privilegio. Desde hace años tengo dicho que en Gran Hermano funciona una justicia privada que es inapelable. Lo que sí puedo decir es que en este caso no ha sido justicia sino una injusticia flagrante.

Los posicionamientos y alegatos fueron anoche en negativo. En contra de Rosa se pronunciaba Fran, Julius lo hacía contra Alejandro y Javier contra su hermanastra Laura. Ellos tres seguían entonces en liza por la repesca, aunque Julius causó baja al ser el menos votado, con un 22,1 %. Me sigue sorprendiendo tanto apoyo, aunque sea derivado por los seguidores de Laura. El jueves entrarán en la casa Fran y Javier, quienes se reparten los otros porcentajes, que eran anoche estos: 47,6 % y 30,3 %. Apuesto a que el mayor es de Fran, que posiblemente sea quien se quede en la casa definitivamente.

Alejandro fue el más castigado en los posicionamientos, mientras que nadie se ponía detrás de Laura. En la fila de Rosa se pusieron solamente Carlos y Charlotte. Llama la atención que Sema se posicionara en contra de Laura hace siete días y anoche estuviese en la fila de Alejandro, donde también estaban Julián (una vez más con la cara hundida entre sus manos), Raquel, Rappel y Belén. A Belén le costó decidirse, lo cual es entendible al elegir ponerse en contra de Alejandro después de llevar toda la semana despotricando en contra de Rosa.

Moleskine del gato

Tuvimos nuevos porcentajes ciegos, con sorpasso incluido. Son estos: 40,7 %, 48,0 % y 11,3 %. De forma que el ahora más votado ha sumado casi 5 puntos, el segundo baja 3 y medio y el más bajo desciende 1 punto, aproximadamente. Espero que el mal momento que vivió ayer Alejandro sea compensado dejándole en la casa. En definitiva, él también está siendo uno de los grandes protagonistas de la edición, mientras que Rosa produce solamente un enorme tedio.