La felicidad llega con la edad

telecinco.es 02/10/2008 08:20

Según una teoría desarrollada por un sociólogo de la , existe una correlación directa entre la y la . Se trata del estudio denominado , y viene a decir que . A pesar de que según la edad avanza van apareciendo problemas inevitables como dolores, enfermedades o la muerte de seres queridos, la gente de mayor edad habría aprendido a contentarse con lo que tiene mucho más que los adultos más jóvenes. En definitiva, la conclusión es que .

De acuerdo que la felicidad llega con la edad, ¡pues menuda novedad! La verdad es que se trata de un clásico en y plantearse qué es la felicidad. Hasta los parecen tenerlo poco claro, si tenemos en cuenta la definición que da el y la enmienda propuesta para la misma. Dice el DRAE en su primera acepción de felicidad lo siguiente: "Estado del ánimo que se complace en la posesión de un bien". Pues menuda decepción. ¿Así que todo se reduce a un tema material? La enmienda propone esta otra definición: "Estado de grata satisfacción espiritual y física". Esto ya es otra cosa. El resto de acepciones también cambia, lo cual es indicativo de hasta que punto no está clara la cosa.

He hablado en otras ocasiones de la necesidad que, según yo lo veo, tienen los concursantes de Gran Hermano de diversificar sus deseos, ya que solamente uno de ellos ha de conseguir el botín. Uno de los grandes alicientes de este programa es que observamos exhaustivamente a un grupo de gente durante el proceso en el que están expectantes de tener lo que desean (el premio final) y dejamos de verles justo cuando pueden disfrutar del mismo. Es aquello de de que la felicidad a veces está escondida en la sala de espera de la felicidad. Somos más felices mientras deseamos tener lo que anhelamos que cuando lo conseguimos. Algo parecido ya dijo , cuando diferenciaba entre delectación y felicidad objetiva, para lo cual pone un ejemplo muy claro: "La felicidad del avaro es el oro, no el goce del oro".

Digo todo esto porque me ha llamado la atención esa ambición desmedida que está demostrando Mirentxu, a la que no solo le basta con conseguir dormir en paz y rodeada de silencio (lo cual no deja de ser una utopía en una casa en la que está rodeada por una decena de personas y con pruebas que duran todo el día), sino que también quiere derribar a aquel que supone un obstáculo en su objetivo. Para ello ha logrado , y ya tenemos bastante claro que ha formado una camarilla en torno a ella, las últimas nominaciones. No podía ser casual que cinco habitantes votasen lo mismo. Si atendemos a la absurda definición académica que mencioné antes, la anciana concursante va en busca de su felicidad (un bien material, el premio del ganador), aunque haciendo caso de la teoría ella debería ser quien menos expectativas tuviera de alcanzar ese premio, en orden a su más avanzada edad.

Ciertamente, Mirentxu entró con cierta convicción de que se aguantaría dos o tres semanas tan solo, y aún se puede cumplir su predicción. Pero me da la impresión de que ahora está revisando esta idea, ampliando su propia expectativa y probablemente reduciendo sus propias cuotas de felicidad. Consecuencia de ello es el grupo que nomina de forma ordenada y coincidente, de lo que la noche del martes parecían arrepentirse algunos. O son muy falsos y han entrado convencidos de que han de fingir mucho y bien, o la estampa en la que vemos a la muy china Li, Ana 'la fantástica' o hasta la 'Chiki' Almudena, consolando a los nominados es producto de un repentino arrepentimiento. Es demasiado fuerte que esta última diga en el 'confe' que se arrepiente de haberles nominado, y además yo no me lo creo. En cualquier caso, se me antoja como algo obsceno tanta hipocresía. Quede claro que todos están en su derecho a conseguir sus objetivos del modo que decidan, y para eso está el enjuiciando y decidiendo si avala los comportamientos de cada uno.

Curiosamente los grupos formados ayer para la prueba responden en buena medida a las dos facciones que ya se han formado en la casa, si bien la mecánica impuesta en esta edición desbarata los grupos con una rapidez pasmosa. Sin ir más lejos, esta semana los dos grupos tienen semejante número de miembros, pero la próxima veremos marchar a dos de un lado y ninguno del otro, con lo cual el 'clan de Mirentxu' ganará fuerza, a no ser que se produzcan deserciones, que es muy probable. De un lado veíamos encadenados a Iván, Raquel (ambos nominados), Loli, Gisela y Almudena (la arrepentida). Del otro, Mirentxu, Ana, Li, Julito y Palomares (que es de momento un miembro liberado, lo que Jacinto de GH III definía como "ir a su peo").

En cuanto a las parejas formadas por la noche, vimos a Ana con Li, Iván con Raquel, Loli con Gisela, Mirentxu con Almudena y Julito con Palomares. Anoche algunos de ellos le estaban haciendo un traje a Mirentxu, criticando que haya guardado comida para ella en un cajón y cosas así, pero en un momento la animada discusión fue sustituida por un apasionante plano de la 'casa 10', donde todos dormían ya. Lamentablemente esto se repite con demasiada frecuencia, cuando vemos que en una casa hay animación nos ofrecen de menú un decepcionante plano vacío y sin interés alguno. Por otro lado, las reglas de la prueba de esta semana, que es parecida en ambas casas salvo que los de la casa 'vieja' van encadenados por los tobillos y los de la 'luxury' por las muñecas, cuentan con un sobre cerrado donde se dice el número máximo de fallos que se exige para superarla. Es mucho más que nunca una tirada de dados en la que no saben la combinación que resultará ganadora.

Hay algo de lo que se está hablando estos días y que me ha dado que pensar. En la última gala nos pareció a muchos que Milá daba demasiada información a los concursantes. La más definitiva fue aquella en que viendo a Gisela llorar tras la salida de Carlos 'soylarepera', Mercedes le dice que no llore, que quizás se lo puedan encontrar a la vuelta de la esquina, o algo parecido. Es evidente que estaba abonando la teoría que tienen sobre la 'otra casa', que se ha convertido ya en una convicción. No en vano tras acabar la gala alguien le decía a Raquel: "Tienes un cincuenta por ciento de posibilidades de irte a la otra casa". Ya lo dan por hecho, como es evidente.

Este gato astuto piensa que Milá no da puntada sin hilo, por lo cual no puedo por menos que sacar como conclusión que es un mensaje útil y/o necesario. Pensemos que si ellos dieran por hecho que los dos concursantes nominados se van a la calle perderían interés por su destino, y sin embargo de esta forma lo que hacen es redoblarlo ya que no solo el no expulsado se queda en la casa, sino que es 'promocionado'. En definitiva, los dos 'mueren', pero uno de ellos para ir a un sitio mejor. Otra cosa es cuando un error de realización les muestra a Eva en el plató junto a la presentadora, lo cual quiere decir que ya tienen la información de que es Carlos H. el que ha ido al cielo, tras pasar diez días en el purgatorio donde ellos siguen penando.

Y dado que he dedicado parte de este escrito a la concursante de mayor edad, cierro con una frase que encaja con el tema a la perfección. Es de Palomares y la pronunció durante una discusión en la que trataban sobre como racionar y administrar la poca comida que les queda, conversación en la que pretendía tener la voz cantante Mirentxu. Llegado el momento, nuestro 'Farinelli' advierte que en su opinión están "haciendo la cuenta de la vieja", y ciertamente tenía más razón que un santo.

[Dejo cartelera, con el stripper que fue enterrador y aspira a poli.]