Imagina que te gusta la mala educación de Ylenia

telecinco.es 06/03/2015 10:06

Imaginemos que nuestra concursante favorita resulta expulsada aunque ninguno de sus compañeros de encierro hubiera contemplado su salida. Imaginemos que su paso por el concurso ha sido bastante decepcionante porque todos esperaban ver la misma persona que había participado antes en otro programa, encontrándose con una versión comedida y limitada, mucho menos atractiva. Imaginemos que tiene la oportunidad de refrendar en plató su operación de cambio de imagen, mostrándose menos vulgar y follonera de lo que habíamos visto en ella, pero no lo consigue. Imaginemos que su actitud en plató no solamente empeora la imagen que había dejado en este concurso sino incluso la que ya tenía anteriormente.

Imaginemos que aunque esperábamos encontrar aquella Ylenia de ‘Gandía Shore’ y nos encontramos con otra más apagada y aburrida, cuando se volvió a mostrar como la Ylenia añorada no nos gustó un pelo. Esto es lo que pasó anoche, tanto entre algunos de los seguidores de Ylenia como entre quienes no llegamos a comprar esa versión despersonalizada que hemos tenido en GH VIP. Ylenia asumió su papel de palmera de Belén con entusiasmo no mayor que el resto, pero al final terminó siendo pelota máxima (como diría ella). No podía decepcionar más.

El enfado de Ylenia con Belén este miércoles fue tan corto como se preveía, siendo soslayado sin más ante el reto planteado ayer, que obligaba a mantener el diezmado grupo belenista unido ante una crucial jornada de nominaciones. Salvo ese tropiezo, ha sido la más sumisa a la voz de su amo. Al menos Sandoval se vengó del “Víctor, cállate” con su propio “Belén, cállate”, y la llamó “Rottenmeier”, algo que Belén no ha logrado olvidar. Hasta Ares terminó encarnando ese esquizofrénico papel que la obligaba a seguir lamiendo su trasero y ofrecerse a ayudarla a ponerse un supositorio, mientras no paraba de meter mierda, convirtiéndose en principal antagonista y enemiga de la princesa del pueblo en la casa.

Ylenia ha sido la más fiel entre los palmeros, perrito faldero de Belén, a cuya sombra ha permanecido durante todo el concurso. Era su ‘miniyo’ y a tres semanas de la final también una de sus principales amenazas. Si alguien podía disputarle el premio a Belén en la final esa era Ylenia, con lo cual su salida del programa allana el camino de la de Paracuellos hacia el maletín. No solo porque ya no habrá de disputar con ella los votos para ganar el concurso, sino porque al consumar la venganza ‘chirlista’ de alguna manera podría haber aplacado los ánimos de los antibelenistas. Tras un nuevo castigo infligido a Belén, más duro e inesperado que los materializados con las expulsiones de Sandro, Víctor y el torero, sus más acérrimos enemigos ya no huelen la sangre. Diría que casi han olvidado la decepción de hace una semana, cuando el marcador daba la vuelta salvándose Belén.

Ylenia fue sincera confesando a Jordi González que se veía en la final. Su prepotencia al ganarle la batalla a Ares hace una semana le ha podido costar caro, aunque ella no lo verá nunca. Anoche rehuía el enfrentamiento con ella, negándose incluso a mirarla a la cara. El “y tú más” es no solamente legítimo, sino incluso lógico en este caso. Ahora bien, la diferencia entre ambas es que Ares se mostraba incómoda viendo alguna de las imágenes que le mostraban, aún estando protagonizadas por ella misma. Sin embargo, Ylenia parecía encantada de verse, evitando la más mínima autocrítica. No reconoció ni un solo error, y en lugar de pedir perdón prefirió retirar el que ofreció a Olvido dentro de la casa.

Imaginemos ahora que seguimos defendiendo a Ylenia porque a pesar de todo nos ha parecido más divertida, graciosa y polémica que otros concursantes. Imaginemos que estamos entre quienes seguimos diciendo eso tan “alternativo” de que es “una diosa” (me cuesta evitar las comillas en casos como este). Imaginemos que haciendo un esfuerzo de buena voluntad, hasta nos parece que se ha fajado bien con Ares, quien tiene mucho que callar y a la que no hay forma de creer como defensora de Olvido después de haber sido uno de sus verdugos más destacados. Así las cosas, Ylenia decide ofender a Olvido llamándola “promiscua”. Si llegado a ese punto no sentimos ganas de retirarle nuestro apoyo y desmarcarnos de este personaje tal vez nos lo tenemos que hacer mirar.

Iba a proponer que imaginásemos una Ylenia que realmente se siente a gusto con ella misma en ese papel retrógrado y viejuno, pero es algo que escapa a la razón. Ni las mentes más imaginativas podrían hacer tal ejercicio. Me parece imposible que ella misma no sienta vergüenza al verse utilizando ese tipo de argumentos. De igual manera que es complicado seguir viendo a Ylenia como “una diosa” tras el papelón que hizo ayer. A no ser que vayamos ahora a beatificar la escasa inteligencia de quien mueve las tetas cuando el defensor de Coman dice que eso no cambiará nada, y las vuelve a menear cuando se lo pide Kiko Rivera, otro lumbreras.

Lo de Kiko es de traca. Sigue utilizando el mecanismo de defensa más cutre que nunca he visto, consistente en argumentar que prefiere ser tal cosa antes que otra sin ninguna relación, generalmente para acusar a su oponente de la segunda premisa en su argumento. Pero lo más llamativo es que llame a Ylenia “maleducada” (que lo es), mientras él empieza diciendo que le “suda la polla” (sic) lo que diga ella y termina con un educadísimo “a mamarla” (sic, de nuevo). Nivelón.

En el regate corto y por sorpresa tiene Ylenia algo de agilidad y chispa. No me atrevo a decir gracia. Pero en general, discutir con ella consiste en saber evitar los proyectiles, que lanza a diestro y siniestro, sin medida ninguna. No solo eso, tampoco exhibe mucha puntería, precisamente. Tanto es así que más de un misil le termina explotando en la cara, y entonces es cuando levanta el brazo y dice “vámonos”, mueve las tetas o engola más la voz mientras se ríe como si todo le fuera ajeno.

Imaginemos que nos gusta y hace gracia Ylenia. Imaginemos que nos agrada verla decir que Kiko Rivera es un “puto gordo de mierda”, sin que él esté delante. Imaginemos que aún así sigamos manteniendo que ella lo dice todo a la cara. Imaginemos que hemos disfrutado viéndola discutir con Ares dándole la espalda y no nos importa que sea incapaz de dar un solo argumento por el que le parece mal esa compañera de concurso (aunque nosotros tengamos unas decenas). Imaginemos que nos parece lo más escucharla insinuar que Ares ha conseguido trabajo a cambio de felaciones. Si esto no supera tu imaginación e incluso te sientes identificado tienes un problema serio. ¡Confirmado!

Probablemente hubo un único momento que Ylenia me sacó una sonrisa anoche, justo cuando le pedía a Kiko Rivera que se cantase algo. Un poco de humor fino y socarrón, ¡albricias! Aunque bien mirado, el intérprete de la canción de los chicos en la prueba semanal cantó en la casa con voz en directo y creo que lo hizo peor que Coman. Y eso que el listón estaba bastante alto. No es fácil superar la marca negativa del ‘euskoguineano’. Ylenia me pareció el primer día que cantaba bien, pero luego el resultado de su grabación lo desmiente. Ella más que cantar lo que hace bien es dar el cante. También anoto en el haber de Ylenia que consiguiera mantener a Kiko Rivera en su asiento todo el rato. Él es muy de abandonar.

El rifirrafe con Ares no fue un revolcón para Ylenia, aunque se disparaba al pie ella misma al no querer mirarla a la cara. Extraña reacción en alguien que presume de decir “todo a la cara”, lo cual ya sabemos que no es cierto. Más bien es todo lo contrario, a espaldas de la gente destila veneno y cuando está cara a cara se atemoriza y termina pidiendo perdón (a su manera), prometiendo empezar de cero, como hizo con Ángela hace unas semanas. Si acaso, la balanza se inclinó del lado de Ares en el momento que dio el gustazo a una parte de la audiencia dedicando a Ylenia eso de “hasta nunqui”.

Ylenia presumió de haber salido después de Ares con la misma convicción que un jugador de fútbol presumiría de haber ganado el partido para el tercer y cuarto puesto, o menos aún. Entre los argumentos que defienden el mayor mérito de Ylenia al haber caído contra Ángela mientras Ares lo hizo frente a Belén, casi no hace falta explicar nada. Ares solo sacó un 51 % de votos frente a la muy respaldada Belén, e Ylenia fue vencida por un 55,8 % frente a Ángela, medio desconocida para parte de la audiencia. Los enfrentamientos fueron claramente desiguales.

Al principio de la noche la diferencia de porcentajes entre Ángela e Ylenia era menor: 48,3 %, 46,3 % y 5,4 %, siendo este último de Fede, salvado para provocar el enfrentamiento entre sus dos compañeras, aunque la expulsión se realizó esta vez en el salón de la casa. Volvió a haber cuenta atrás, igual que una semana antes con 40 minutos por delante, lo cual evita cualquier suspicacia maliciosa. Al parecer, volvió a dar la vuelta el marcador, aunque en este caso para hacer cumplir todas las encuestas de referencia, no así las previsiones dentro de la casa. Tampoco las predicciones de Sandro Rey, que en Twitter días antes pronosticaba que no saldrían ni Ylenia ni Ángela, sino Fede. Que Dios le conserve la lacia melena, porque lo que es la capacidad de precognición la tiene bien jodida.

Ylenia salió de la casa después de abrazar a Fede, tal vez por última vez. Tras prometer que se pegaría “una noche de escándalo” aclaró que con control, lo cual no sé si está dicho para tranquilizar al italiano o realmente anunciaba su marca de preservativos preferida. Luego en plató abrazaba un par de veces a la madre de Fede y se mostraba molesta con este, a quien evitó llamar novio. No siente amor hacia él sino mucho cariño. Nos había parecido viendo la relación entre ambos. Me pareció que le sentaba como un tiro la definición que hacía Fede sobre él mismo durante su participación en el programa Mujeres y hombres y viceversa. No por esto, sino porque después añadía “igual que Ylenia”, a la que había llamado chula y maleducada de forma muy poco disimulada.

En su despedida a quienes han sido compañeros de encierro estuvo correcta, mucho más que durante la ingobernable entrevista que le hizo Jordi. Solo evitó dirigir una sola palabra a Coman, recordando la disculpa de dentro de la casa a Ángela. Me gustó el reconocimiento a esta concursante y que finalmente haya lamentado lo dicho y hecho en contra de ella.

Fede se acostó nada más terminada la última conexión con plató y sabiéndose nominado. No sé si influyó más en su estado triste el estar nominado, la salida de Ylenia o que esta se despidiera de Belén diciendo que ella debe ganar el programa. Por si albergaba alguna posibilidad de llevarse el premio él. Mientras tanto, el maneki-neko (el gato de los chinos, que es japonés y mueve el brazo) parecía despedirse de Ylenia tras la cama de Fede diciendo aquello de “hasta nunqui, un besi”.

Nominaciones

Anoche las chicas fueron elegidas por la audiencia a través de la App del programa como el mejor grupo en la prueba semanal, lo cual les daba derecho a elegir un concursante ya expulsado para que nominase con un punto en su nombre. Chari y Aguasantas eligieron a Ares, Belén a Ylenia y Ángela se lió y lo dejó en manos de Sandro. No fue grave el error porque Sandro se entera más bien poco y desaprovechó la ocasión de mover un poco la lista de nominados, que permaneció igual antes de su voto a Chari, gran amiga de Ángela en la casa.

Los votos fueron así:

Chari - Fede 2 / Belén 1 / Belén 1 (Ares)

Coman - Fede 2 / Belén 1

Belén - Chari 2 / Ángela 1 / Ángela 1 (Ylenia)

Fede - Aguasantas 2 / Chari 1

Aguasantas - Belén 2 / Fede 1 / Belén 1 (Ares)

Ángela - Belén 2 / Fede 1 / Chari 1 (Sandro)

Nominados Belén (8 puntos), Fede (6) y Chari (4). Antes del voto de Sandro salía igualmente Chari con 3 puntos, y en su mano estaba subir a Aguasantas o la misma Ángela que había depositado su confianza en él. Tampoco tenía mucho margen de maniobra. Aguasantas y Ángela se quedaron en 2 puntos, y una vez más el contador a cero para Coman, a quien llaman estratega como insulto y en caso de ser cierto no parece que le esté resultando nada mal la estrategia. No es punible ser estratega sino ser un mal estratega. Anoche volvía a mostrar cierta clarividencia al decir que al quedar solo dos del otro bando ya se han asegurado el pase de uno de los de su grupo a la final. Así es.

La estrategia ‘chirlista’ era subir con 6 puntos a Belén y Fede, asegurándose de ese modo que quedaban ambos nominados. Renunciaron a decidir ellos el tercer nominado, lo cual hubieran podido hacer fácilmente en caso de no haber cuatro votos en juego fuera de su control, en manos de exconcursantes. Belén y Fede no habían previsto el escenario de la salida de Ylenia, por lo que hubieron de improvisar reunión de urgencia, con el cadáver de la finada todavía caliente. No sé qué diablos debieron pactar porque repartieron sus 6 votos entre tres concursantes diferentes con puntos distintos. Sospecho que Fede no siguió lo pactado, aunque no lo puedo asegurar.

Moleskine del gato

Me sigue provocando una mezcla de pena e hilaridad que Chari llame exnovio a su novio y le mande un saludo besando un anillo (o algo así) justo cuando entra a nominar. Por cierto, Chari le cambió anoche la cama a Santi, que durmió con su mano cogida a la de Coman. Mucho mejor así.

Los abucheos en plató, hasta ahora achacables a los familiares del expulsado, ahora son cosa de “dos o tres mataos”, según aclaró Ylenia cuando le caía a Belén su ración semanal de abucheos. La reacción de esta concursante sigue siendo igual de equivocada ante la expresión de una parte del público. No creo que viera nunca a Jesulín faltando al tendido 7 ante una de esas pitadas monumentales que sufren a veces los toreros.

Eso de los abucheos es según y como, claro está. Por ejemplo, ninguna censura si es Ylenia la que abuchea a Coman de forma tan patética que nadie la sigue en plató. Si a Belén le pareció mal se lo calló en este caso. ¿No debían prohibir los abucheos? Yo ya...