De las últimas noches, la del viernes fue decisiva para lo que ha de generar los próximos días la casa de Guadalix de la Sierra. Podríamos decir que fue la noche de las carpetas rotas, título que tomo prestado (con su permiso) a @LeocaprioDnardo. También podríamos decir que hubo siembra de calabazas, aunque no podría asegurar que al final alguna interrumpa su crecimiento. Aritz le dijo a Han que solamente lo quiere como amigo. Nied vino a decir lo mismo a Vera. Mientras tanto, Suso le decía a Sofía que cada uno debía continuar por su lado.
Las reacciones fueron bien distintas: Han parecía contrariado; Vera no dudó en cambiar de túnel viendo uno cerrado (al menos temporalmente), lo cual le llevó a Ivy, y Sofía reaccionaba como un crío de temprana edad al que le quitas el juguete que le gusta. Sofía nos ha estado engañando, o bien nos ha estado engañando. No hay otra. Sospeché muy pronto que se apartaba de las chicas para luego poderlas acusar de haberla dado de lado. También que para ello necesitaba encandilar a algún chico antes que ninguna otra. Maite, su madre, le aconsejaba primero que se encamase con él (lo decía de forma más explícita), luego que se limitara a hacer unos juegos manuales, y más tarde otra vez que se debían acostar, además delante de las narices de Raquel, de quien siguen pensando que es novia de fuera de Suso.
Sofía nos convenció de que ella era como Suso, que tiene dicha una perla como la que sigue: “Una vez la he metido, cambio de dirección”. Es decir, que ella buscaba satisfacer su deseo sexual con Suso sin pedir nada que fuera más allá de eso. También le aclaraba Sofía a su madre que si Suso es un cerdo ella lo es más. Esa Sofía desinhibida y sin ataduras morales en lo sexual tenía todas mis simpatías. Digo todavía más, la reacción de media casa, especialmente de las mujeres, criticando escandalizadas a Sofía por haberse metido en la cama de Suso la primera noche me pareció tan previsible como lamentable. Lo malo es que todo eso debía ser mentira. Eso, o era fingida la pataleta de niña caprichosa que protagonizó el viernes, abrazando a Suso cuando este se intentaba zafar de ella, y casi pidiendo por favor que no le diera la espalda tan pronto. Una de las dos cosas no puede ser cierta.
Puede que las formas de Suso no fueran las más correctas. Complicado pedirle a semejante hombre de Cromañón delicadeza con una mujer. Pero la reacción de Sofía no se entiende. Me inclino a pensar que nos había engañado antes y en ese momento reaccionó de forma espontánea. Me parece increíble que pudiera estar fingiendo el disgusto y las lágrimas. Como ella mismo dijo, estaría en Hollywood preparada para cargarse de Óscars. Su reacción hacia Suso no se entiende, aunque sí que se revolviera de forma inmediata contra Raquel. Esta concursante había estado diciendo a Suso minutos antes que no se había acercado a él porque estaba con Sofía. La sucesión de situaciones da que pensar si Suso no decide poner distancia con Sofía provocado por Raquel.
Raquel era “la otra” hasta el viernes. Desde entonces, no he visto gran acercamiento entre ella y Suso. No se acercará por ahora, dado lo mucho que a ella le condiciona estar nominada. La importancia que da a evitarlo solo es comparable a la que le dio a no quedar nominada, y fue justo eso lo que la llevó donde está ahora mismo. Por lo menos ahora Suso reconoce que fue Raquel quien primero le gustó, y hace una diferenciación entre ambas mujeres que le define como el gran gañán de esta edición. Dice que Sofía es para follar y Raquel para conocerla mejor poco a poco. Lo peor es que añade que Raquel tiene una conversación y Sofía no, lo cual es fundamental porque él le da mucha importancia a la conversación. Pero durante la primera semana yo solamente he visto a Suso 'Séneca' hablar de polvos.
Es triste, pero la opinión de Suso puede que sea lo único bueno que le ha pasado a Raquel desde la gala del pasado jueves. Quique era hasta ese momento su mejor amigo, y el mismo jueves por la noche ambos se hablaban con aparente desprecio. Supongo que Quique comenzaba a renegar de ella viendo que había quedado nominada. Desde entonces, él y Marina han renegado de Raquel. Ese fue el primer paso, luego no han parado de clavarse puñales entre ellos tres, aunque el sábado Raquel se metía en la cama de Quique, posiblemente mendigando volver a ser admitida en el club de los traidores, al que ella misma pertenece. Lo malo de Raquel no es que se haya destapado como estratega, sino que su estrategia pasaba por manipular a los demás buscando el beneficio propio y no el del grupo. Si quieres implicar a alguien en tu estrategia lo mejor es pensar también en su conveniencia. Es lo mínimo.
A Raquel la nominaron siete de sus compañeros, de los cuales cuatro no le dieron el solitario punto sino dos. Naturalmente, buscaban igualar lo máximo en votos a Raquel y a Sofía, para así evitar que alguno de ellos subiera a la palestra. Si se lo llegan a contar a Raquel creo que el drama hubiera alcanzado cotas impensables. Raquel es un drama permanente, del que posiblemente ni puede ni quiere salir. Mucho menos ahora que está nominada y no las tiene todas consigo. Ella podría ser la villana de esta edición, pero visto lo que se arredra ante una nominación y su tendencia natural al drama creo que ni para eso vale. Las esperanzas quedan depositadas en Marina entonces. Ella sí que puede ser una buena villana.
La de Han y Aritz fue la siguiente carpeta rota de la madrugada del viernes al sábado. Han sintió el rechazo de Aritz y ni siquiera le compensó la paciencia que ha demostrado este con él. Tampoco parecía estar valorando el inmenso cariño con el que le trata y que se esté sacrificando al ceder al chino la mitad de su cama. El morro de Han es visible a la legua, porque llegó a intentar quedarse con la cama de Aritz porque es más blanda que la suya. Aritz le dijo que quería dormir en su cama, aunque no le importaba que se quedase. Desde entonces han dormido cada día juntos, no desaprovechando Han la oportunidad para acurrucarse bien en Aritz, cuando no en meter su mano bajo la camiseta del pijama o en acariciar sus pezones por encima.
Me temo que el rechazo de Aritz fue poco contundente, y no ha servido para que Han le siga llamando “mi marido” y siga teniendo esperanzas en que sean algún día algo más que amigos. Aritz advierte a otros de situaciones que les pueden explotar en la cara, pero no se da cuenta de que es su relación con Han lo que más posibilidades tiene de incendiarse. A pesar de que Aritz ha respondido a veces con una larga cambiada cuando le han preguntado si es heterosexual (“ese es mi secreto”, ha llegado a decir), creo que no es el otro homosexual de la casa. Y digo “el otro” porque me da la impresión de que esa posible trama está asegurada, aunque no termino de entender que dos homosexuales ahí dentro vayan a congeniar seguro.
Hablando con Maite, Aritz dejó la puerta abierta a tener algún día una relación con otro hombre. Lo que algunos podemos ver como puro 'open mind' otros lo consideran una indecisión sexual significativa. Yo iría preguntando a otros chicos si lo que se quiere es saber las posibilidades de que Han salga con marido de verdad, y no este imaginario de ahora. No me divierte nada ir a la caza del gay, más bien me repele la idea. Ahora bien, posiblemente deberían preguntarle a otros chicos. Considerando excluidos a Suso, Vera y Carlos (aunque este solo por su compromiso público con Ivy), quedarían Quique y Muti. Yo empezaría por este último. A Quique mejor preguntarle si realmente es médico.
Que Han haya pedido una hora sin cámaras con Aritz, contando con la aprobación de este, me parece otra torpeza del tipo del sombrero. Así es como Aritz se hace llamar en su blog. Porque este concursante tiene blog, perfil en YouTube, fotolog, Twitter y a saber qué más espacios personales en Internet. Ahora bien, sigue vendiendo que no tiene Internet. Fue lo primero que le preguntó Han cuando ya podía hablar en castellano, porque a él también le ha llamado la atención y le ha parecido una mentira. “No es ese mi secreto”, le respondió el del sombrero.
La tercera carpeta rota era tan endeble como las otras dos. En realidad, son esperanzas rotas, más que otra cosa. Se trata de Vera, que ha seguido su doble juego con Ivy y Niedziela, aunque ha terminado decantándose por esta, especialmente desde que está convencido de que Ivy tiene alguna relación con Carlos. El engaño ideado para ocultar el secreto del jardín, le ha servido a Vera para justificar que ha confundido la realidad con la ficción y ha terminado enganchado a la chica del circo. “Soy muy atosigador”, le decía el otro día. Niedziela parecía mirarle con cara de estar pensando “vale, pero ve pagando las fantas”, aunque en el fondo creo que estaba sufriendo por él.
Atosigador no sé, pero bastante patético sí me está pareciendo Vera. No quisiera ser demasiado duro, pero la conversación en la que Niedziela le daba calabazas fue todo un monumento a la estulticia. Y mucho me temo que a partir de ahí solo cabe ir empeorando. No me será fácil apartar de mi mente la secuencia de Vera sentado en el sofá con Niedziela a su derecha e Ivy al otro lado. Mientras con la primera está medio acaramelado, acerca su boca a la mexicana y le propina un mordisco entre el cuello y el hombro. Ivy molesta aparta el brazo de Vera, que él había acercado ignoro con qué intenciones. Una cosa es jugar a dos bandas y otra hacerlo de forma tan tosca.
A todo esto, la nominación a Maite parece tenerla medio anulada, lo cual lamento como espectador. Hemos perdido parte de su chispa, aunque en ocasiones vuelve a brillar, especialmente cuando se dedica al poco noble arte de despellejar a los demás junto a su hija Sofía. La madrugada del sábado la mayoría de sus compañeros decidieron gastarle una broma, untando su cara y sábanas con gel de afeitar. El brazo ejecutor fue de Muti, aunque le acompañaban muchos más. Raquel se había apartado del grupo cuando pensó que la broma a Maite podía perjudicarla a ella de cara a la expulsión. Maite entró en brote, pero de forma mucho más moderada de lo acostumbrado. Esta vez pensó en rentabilizar la supuesta broma para intentar salvarse este jueves. “Ya sí que no te vas”, le dijo Marta, la primera que defendía a Maite, y la única junto a Sofía. Han dijo una cosa y la contraria, de lo cual tomo nota.
El episodio de la broma de la crema de afeitar no tendría más importancia de no ser porque contribuyó a que muchos diéramos la razón a Maite en que la mayoría de concursantes están comportándose como un rebaño de ovejas. No sé si son más gallinas u ovejas, porque antes de la broma fueron a consultar al ‘súper’ si debían hacerla (naturalmente no se pronunció) y después le pedían disculpas a la propia Maite, supongo que temiendo haber ofrecido una mala imagen. Maite terminaba aceptando las disculpas, aunque en un principio amenazó con reventar cabezas.
“Hay que saber cuándo se hacen las bromas”, decía Maite, aludiendo a su dificultad para dormir y que todo esto pasaba cerca de las cuatro de la madrugada, andando ya por el tercer sueño. En realidad, lo más importante no es tanto cuándo sino a quien. Si le hubieran hecho esa broma a uno de los que consideran sus amigos (aunque se claven puñales por la espalda) puede considerarse una broma. Si se hace a un enemigo declarado no es broma sino faena.
Tiene toda la pinta de que pretendían provocar a Maite para que viéramos otra vez una de sus exageradas reacciones. No descarto que buscasen socavar un poco más su imagen, algo de lo que se ha encargado ella misma los primeros días. Siendo así, me alegro de que no viéramos a la Maite auténtica que se come a las ovejas. Ese toro duerme esperando la indulgencia de la audiencia este jueves. Ojalá termine llegando el indulto.
Moleskine del gato
Anoche vimos algunas de las apuestas de esta semana en el Debate que presenta una vez más Jordi González. Nos perdimos algunas, que imagino guardan para la gala de este jueves, pero pudimos conocer las siguientes:
Han > Nied ve muertos en la oscuridad.
Aritz > Marina no es madre.
Raquel > Maite y Sofía son madre e hija.
Suso > Maite es madre de Sofía.
Amanda > Sofía es hija de Maite.
Maite > Suso y Raquel son novios.
Podemos añadir la apuesta de Sofía, que conocimos tras el programa contado por ella misma. Se suma a lo de Marina, lo cual formula de esta forma: El bebé de Marina no es suyo.
Doy importancia a la forma exacta como está formulada la hipótesis porque no tengo claro que valga cualquier cosa. Es algo no explicado y que me parece interesante señalar. Anoche a Han, que luego cambió su apuesta, no le valía con decir que Maite y Sofía son familia, sino que debía explicitar un lazo familiar determinado. Esto me hace pensar que pueden pedir concreción para dar por acertada una apuesta. En tal caso, no es lo mismo decir “Marina no es madre”, que “no tiene un bebé”, o “el bebé no es suyo”. Estrictamente, lo único que acertaría de verdad sería decir que su supuesto hijo es un muñeco, o similar. Esto no se conoce todavía oficialmente, pero está confirmado que Marina nunca ha sido madre, y la hemos visto en foto con el reborn en brazos.
Llama la atención ver a Suso, Carlos, Vera y otros criticando a Maite por haber estado fingiendo que no es madre de Sofía, lo cual ya tienen medianamente claro casi todos. Opinan que una mentira así no vale los 100.000 euros que les costaría revelarlo. Lo dice el que se hizo pasar por su hijo, estirando el supuesto drama familiar mucho más de lo necesario. También el que se pasa el día observando como su novia tontea y se roza con Vera. O el que para poder pillar cacho se inventa engaños que no estaban en el guion. Tal vez no entiendan que el programa les obliga a jugar este juego. Y el juego es más o menos igual para todos.
Los porcentajes ciegos, también conocidos anoche en el Debate, son los siguientes: 61 %, 30 % y 9 %. Si esto no da un vuelco tenemos a Maite fuera. Si es así, lo vamos a lamentar. Mucho, me temo.