Siempre estoy a la búsqueda de productos diferentes, más alternativos, más sostenibles y que se diferencien de lo que nos intentan imponer las grandes corporaciones con publicidad engañosa.
Acabo de descubrir una línea de cosméticos basada en aceites esenciales y 100% española que es digna de mención. Como su nombre bien indica, Alqvimia es una mezcla de la mística y el método experimental. Ciencia y espiritualidad se unen para crear unos aceites sensuales para muy diferentes usos.
Con base en Girona más para ser más exactos en Can Duran, Alqvimia lleva más de treinta años bajo la batuta del perfumista Idili Lizcano.
Las materias primas son ecológicas y naturales diferenciándose así de la mayoría de los productos cosméticos donde los productos sintéticos tienen una gran presencia.
La marca engrosa gran variedad de productos, tanto para el cuerpo como para la cara. Entre los aceites corporales cabría destacar el aceite reafirmante de busto o como lo llaman en inglés, que siempre suena mucho más profesional Bust Firming Oil. Entre sus ingredientes se encuentran aceites vegetales de almendras, avellanas, rosa mosqueta ecológica. Estos tres aceites constituyen la base de la fórmula siendo una fuente inmejorable de ácidos grasos esenciales, favoreciendo la formación de membrana celular, crecimiento de la piel y activando los mecanismos de defensa cutáneos. El extracto de fenograco es un poderoso reafirmante natural y el extracto de resina de árbol commiphora mukul ayuda a aumentar los triglicéridos tensando así y reafirmando el busto.
Alqvimia acaba de inaugurar nueva tienda en Madrid, ALQVIMIA Beauty Space, Ramón de la Cruz 13, donde además de tener a tu disposición este aceite y multitud de otros productos entre los que se incluyen la nueva línea rejuvenecedora facial puedes hacerte tratamientos faciales y corporales in situ.Es una cosmética de gama alta con un 95% de ingredientes naturales de origen vegetal y mineral y con conservantes extremadamente suaves, lo que lo hace mejor para tu salud y para el planeta. Una cosmética sin derivados del petróleo, como parafinas o siliconas. Sin perfumes artificiales ni sintéticos, ni filtros solares químicos. Pero, atención, lo mejor de todo, SIN CRUELDAD, sin necesidad de hacer experimentos con animales y solo ya por eso y por el cariño y pasión que demuestran por sus productos vale la pena probarlo. Todo un lujazo para los sentidos.