Se llama Base Camp Bonn Young Hostel y es la idea de un hotelero alemán de 44 años llamado Michael Schloesser.
Este empresario afirma que es el primer hotel de caravanas y vagones Pullman del mundo. Inaugurado en agosto, tiene 120 camas repartidas en 15 espléndidas caravanas vintages, dos clásicos vagones Pullman y cuatro caravanas Airstream, famosas por formar parte del sueño americano tras el final de la II Guerra Mundial. Eso sí los baños son compartidos.
El precio va desde los 22 hasta los 69 euros por noche.