Los taxistas y su fama. Es uno de los colectivos profesionales más vilipendiados en el mundo. Junto a periodistas y abogados, que tenemos una planta sólo para nosotros en el infierno, según contaba Woody Allen.
La revista Forbes Traveler, que como podéis imaginar tiene un público objetivo que no es el mochilero, ha hecho su selección de los peores sitios en los que arriesgarse a realizar una carrera. Habla de México DF, donde de verdad es muy peligroso.
Tengo una amiga a la que un taxista le realizó un secuestro exprés el día de su cumpleaños. Volvía a casa llena de regalos. El buen hombre paseó por a mi amiga por todos los cajeros de la capital. Pero eso sí, no le quitó los regalos !!!!! y le cantó Las Mañanitas, la canción con la que se homenajea al que cumple años por aquellas tierras.
También cita Camboya, Grecia, Indonesia o la India. En este último país, un taxi es una aventura. Puedes tener tres conductores que paran a mitad de camino y "atajan" para comprarse un cigarro en un sitio donde le sale más barato. Esto pasó en Delhi. En Agra fue mejor. El chófer de un rickshaw me dejó llevar a mí la motocicleta porque estaba cansado. Y conducir por la India os aseguró que deja el tráfico madrileño tan tranquilo como una playa desierta.
Habla muy mal de los de Nueva York. Sobre todo por lo penoso del viaje, y en eso tiene razón, en que se transforma llegar a la Gran Manzana desde el Aeropuerto J.F.K. Sin embargo una vez dentro de Manhattan, el taxi es barato y encuentras pequeñas sorpresas. Allí conocí a un joven haitíano que hablaba español perfectamente. Estudiaba por la noche, era licenciado en Literatura española, y era el fiel ejemplo del sueño americano.
Aventuras con taxistas he tenido muchas, pero está feo hablar demasiado de uno mismo. ¿Y vosotros? ¿Por qué no nos las contáis?
Fuente: Forbes Traveler.