No me digáis que no lo habéis pensado muchas veces. Qué feas quedan esas estructuras en medio de las calles de muchas ciudades. Vas por un paseo y de repente, una caja fea de hormigón que esconde una estación eléctrica. O esos aseos públicos que solo por su aspecto ya te da vergüenza hasta acercarte.
En Holanda parece que han dado con la solución. Un artista ha trasformado esas instalaciones con sus pinturas. Roelan Otten, diseña mosaicos, formas geométricas, pinturas e imágenes de alta resolución de fotografías. De esa forma evita que se rompa la uniformidad de una calle con un mamotreto de este tipo.
Su proyecto se llama Camouflage City y ya ha trabajado en Amsterdam y en Rotterdam.
Una gran idea.
Aquí podrás ver más imágenes de Otten