Guardiola y el Real Madrid vuelven a cruzarse por la Audi Cup

Después de proclamarse campeones de la International Champions Cup de Australia a pesar de caer ante la Roma en los penaltis (0-0) y ganar al Manchester City (1-4), el cuadro madridista se impuso de nuevo en la edición china del torneo tras vencer al Inter de Milán (0-3) y, en los penaltis, al AC Milan (0-0).

En su regreso a tierras europeas, el conjunto de Rafa Benítez volvió a mostrar su mejor versión. El martes se imponía al Tottenham Hotspur (2-0) gracias a los goles del colombiano James Rodríguez y el galés Gareth Bale, convertido en el gran atractivo del equipo en ausencia de Cristiano Ronaldo y Karim Benzema.

Sin el portugués, con problemas en la espalda, ni el francés, con molestias musculares, el galés pasó a centrar las miradas en el ataque madridista, pasando de su habitual posición de mediapunta con Benítez a ocupar uno de los puestos de delantero centro. El de Cardiff respondió a la confianza robando un balón en fallo defensivo inglés para enviar un fuerte zurdazo desde fuera del área que sorprendió al portero rival.

Con el alemán Toni Kroos, el croata Luka Modric, el colombiano James Rodríguez e Isco en la medular, el Madrid encontró el equilibrio que buscaba. "El equipo es muy bueno y compacto en defensa. Es pronto todavía porque hemos estado en Australia, China y ahora aquí. Pero de momento estoy contento con el equilibrio del equipo", señaló Benítez tras el partido. El duelo dejó además los debuts del centrocampista balear Marco Asensio y del delantero madrileño Borja Mayoral.

EL BAYERN, VIEJO CONOCIDO

Será el reencuentro entre dos viejos conocidos, que se vieron por última vez las caras en un partido de grato recuerdo para los madridistas. El 29 de abril de 2014, los jugadores entonces dirigidos por Carlo Ancelotti arrollaban a los de Guardiola en el Allianz Arena (0-4) con dobletes de Cristiano Ronaldo y Sergio Ramos, un resultado con el que accedían a la final que a la postre les daría la 'Décima' en Lisboa ante el Atlético.

Será el momento de la venganza para el técnico catalán, que necesita una victoria balsámica para hacer olvidar a sus aficionados la derrota en la Supercopa de Alemania, que el Wolfsbourgo alzó tras un fallo de Xabi Alonso en la tanda de penaltis.

Los muniqueses empezaron a curarse las heridas el martes con la victoria en semifinales de la Audi Cup ante el AC Milan (0-3), en un partido en el que los locales dominaron y ofrecieron una gran imagen. El lateral izquierdo español Juan Bernat abrió la lata en el minuto 23 después de que su disparo golpease en un rival.

En el 73, Mario Götze incrementó la cuenta tras recoger un rechazo de la defensa después de que lanzase Robert Lewandowski. Precisamente el polaco fue el encargado de cerrar la goleada al anotar un soberbio tanto de volea en el minuto 85.