Las madres de las niñas robadas gritan en Nigeria que dónde están sus hijas porque en casi 3 semanas de secuestro el gobierno del país no ha sido capaz de dar un paso para rescatarlas.
Pero en este mundo al revés a dos de las organizadoras las detienen por protestar.
Justo cuando el líder de los secuestradores, islamistas radicales, ha reivindicado el rapto en un video. Exaltado y casi loco ha dicho que él las secuestró y que, por Alá, las venderá a todas en un mercado para casarlas, como si el Islam de verdad tolerara ese tipo de aberraciones.
Las que han logrado escapar han relatado que a algunas las violan hasta quince veces al día.
Los bárbaros pertenece a Boko Haran, un grupo terrorista que pretende imponer un estado islámico con la violencia más salvaje. El propio nombre de la organización, con vínculos con Al Caeda, significa la “educación occidental es un pecado”. Hace tres semanas sus milicianos armados irrumpieron en este colegio y se llevaron a las niñas en camiones porque estaban violando la norma de que los niñas no deben estudiar.
El presidente del país que por primera vez ha hablado del secuestro dice que están rastreando la zona y que han pedido ayuda a Estados Unidos, mientras las madres siguen gritando...