Sentencia histórica. Once años después del asesinato de una menor a manos de su padre, denunciado en más de 30 ocasiones por malos tratos, la ONU ha condenado a España por negligencia ya que el asesinato se produjo durante el régimen de visitas establecidos por un juzgado. Según la ONU, España no protegió debidamente ni a la madre ni a la menor.