Cinco años después del asesinato de Marta del Castillo, la policía está convencida de que la menor está en la zona de la Majaloba por lo que ha solicitado someter a Miguel Carcaño al 'test de la verdad'. Según ha explicado Patricia Pardo, esta técnica consiste en meter al acusado en una habitación a oscuras con un casco conectado a unos electrodos mientras ve imágenes y preguntas en un ordenador. En el momento en el que el acusado reconoce una de esas preguntas genera una onda que sería considerada un positivo en la investigación.