El Debate de Gran Hermano de este domingo viene cargado de sensaciones muy fuertes. El tonteo entre Laura y Marcelo ya ha pasado a mayores y ella, entre lágrimas, ha tenido que aceptar que le gusta de verdad. En unas imágenes explosivas, los fans del concurso verán como los dos se metieron en la cama juntos y se abrazaron. Parece que la duodécima edición de Gran Hermano ya tiene una pareja de verdaderos tortolitos.
Porque a Joaquín y Marta no se les puede denominar tortolitos, precisamente. Lo suyo es algo mucho más explosivo, incontenible. Después de sus flirteos han decidido pasar a la acción y, en el Debate, se podrá ver el segundo edredoning importante de esta edición del concurso. Un encuentro con unas frases y unos comentarios que darán que hablar durante toda la semana, si bien no terminan siendo el sambenito de Joaquín para el resto de su vida.
Chari lo pasa mal
Por otro lado, el Debate mostrará la otra cara de Chari. Si hasta ahora de esta concursante sólo se conocía su facetas desenamorada, por cómo ha ido olvidando a Rubén, su pareja antes de entrar, ahora se la verá también hundida. "Estoy un poquito agobiada ahora mismo. O me voy o la lío aquí. O me voy yo a mi casa, eso sería una opción buena". Ya no es todo de color de rosa para ella.
Maquinaciones
Entretanto, como todos los años, ya han comenzado las conspiraciones y los pactos. El más ducho en esta técnica parece ser Joaquín, que en el Debate quedará retratado como un auténtico estratega a juzgar por sus comentarios: "Si quieres llegar al final tienes que barrer mucho".
Su compañero para teorizar las nominaciones es Yago. El ex de Yola Berrocal lo proclamará a los cuatro vientos muy claramente: "Si quieren guerras psicológica estoy preparado para todo".