La Secretaría General del Banco de España podrá indicar a la banca el tratamiento a dar a ciertos productos

El Boletín Oficial del Estado (BOE) publica este miércoles una resolución por la que se modifica el acuerdo que otorga a la Secretaría General de la institución las competencias relativas a la supervisión de la conducta de mercado y transparencia bancaria, anteriormente atribuidos a la Dirección General de Supervisión.

Con esta delegación de competencias, el Banco de España pretende que se mantenga un marco "claro" de actuación que favorezca "la celeridad, eficacia y eficiencia" en el desempeño de las tareas que tiene encomendadas.

En esta revisión se han atribuido nuevas competencias a la Secretaría General, entre las que figura la potestad de formular observaciones y recomendaciones a las entidades de crédito y otras entidades sujetas a la supervisión del Banco de España en materia de transparencia bancaria y protección a la clientela, así como de sistemas y mecanismos de atención y resolución de conflictos con dicha clientela.

OTROS REQUERIMIENTOS

También podrá remitir escritos solicitando el cumplimiento de observaciones, recomendaciones o requerimientos previamente formulados en materia de transparencia bancaria y protección a la clientela.

Asimismo, podrá efectuar aclaraciones, informaciones adicionales o el envío de documentación necesaria o recordando la obligación de acusar recibo de los escritos remitidos o de dar cuenta de las medidas adoptadas para el cumplimiento de los requerimientos formulados.

La Secretaría General también tendrá facultades para formular peticiones de información a autoridades supervisoras nacionales o extranjeras, así como contestar a las peticiones remitidas por éstas sobre aspectos relacionados con las entidades.

La resolución también dota de más competencias al vicesecretario, quien podrá resolver expedientes de valoración de idoneidad, con la valoración positiva, de miembros del órgano de administración, directores generales o asimilados y de las personas que asuman funciones de control interno u ocupen puestos clave para el desarrollo diario de la actividad de las entidades sujetas a la supervisión del Banco de España y de sus dominantes.