Ban condena el ataque contra un campamento de la misión de la ONU que ha dejado tres muertos

"El secretario general está indignado con el ataque mortal contra un campamento de la Misión de Estabilización Integrada Multidimensional de la ONU en Malí (MINUSMA) en Kidal, que se ha llevado la vida de dos 'cascos azules' y de un contratista civil de Naciones Unidas", ha afirmado Ban en un comunicado emitido tras el ataque.

Según el Consejo de Seguridad, que también ha condenado el ataque, los dos 'cascos azules' eran de Guinea, y el civil, de Burkina Faso. Ban ha ofrecido sus "sinceras condolencias" a los familiares de los fallecidos, ha expresado a los Gobiernos burkinés y guineano su apoyo y ha manifestado su apoyo a los heridos, a los que ha deseado su "pronta recuperación".

"El secretario general reitera que este tipo de ataques asimétricos contra la misión no obstaculizarán la determinación de las Naciones Unidas en su apoyo al Gobierno de Malí, a las partes firmantes del acuerdo de paz y al pueblo en sus esfuerzos por alcanzar la paz y la estabilidad" en el país, ha indicado.

Asimismo, Ban ha hecho hincapié en la necesidad urgente de llevar a los atacantes ante la Justicia y ha reiterado que los ataques contra los agentes de mantenimiento de la paz de la ONU podrían ser calificados como crímenes de guerra según el Derecho internacional.

La ONU ha informado de que la MINUSMA ha tomado "medidas inmediatas" para asistir a los heridos tras el ataque y continúa "reforzando la seguridad" de sus trabajadores.