El CICR reanudará sus actividades humanitarias en Sudán tras levantar Jartum su suspensión

Las autoridades suspendieron el 1 de febrero pasado las actividades del CICR en el país, aduciendo razones técnicas. "El hecho de que se levante la suspensión mientras continúa el diálogo es un paso por el buen camino", ha afirmado el jefe de la delegación del CICR en Sudán, Jean-Christophe Sandoz.

"Podremos reanudar nuestras labor humanitaria y prestar socorro a las personas afectadas por el conflicto y la violencia. Es una buena noticia", ha opinado.

Después de estar ausente siete meses de las zonas afectadas por el conflicto, el CICR reemprenderá el diálogo con todos los que participan en el conflicto y con las personas afectadas por esta situación para cerciorarse de que aceptan su labor neutral e imparcial.

"Nuestra prioridad es enviar a nuestro personal sobre el terreno lo antes posible", ha precisado Sandoz. "Dado que la situación humanitaria ha cambiado desde febrero, lo primero que haremos será evaluar las necesidades en las zonas de conflicto. Después decidiremos lo que se puede hacer y sobre esta base readaptaremos nuestra capacidad", ha remachado.

El CICR trabaja en Sudán desde 1978. En 2003, amplió sus actividades operacionales a la región occidental de Darfur, donde ayuda a las personas que sufren las consecuencias del conflicto armado y otros tipos de violencia.